Políticas

30/9/1998|602

Menem y las patronales van por más

La nueva ley laboral es tan sólo el punto de partida de un ataque en regla contra los trabajadores. Reduce las indemnizaciones hasta un 80% para los trabajadores que ingresen a trabajar de ahora en adelante, una vez que hayan pasado el “período de prueba”.


Ese período, de 30 días, puede ser ampliado a 180 días en los convenios colectivos que sólo la burocracia está autorizada a firmar. En los convenios firmados en los últimos 5 años, la burocracia ya accedió a ampliar el período de prueba y se comprometió a mantenerlo incluso si se producía algún cambio en la legislación.


La burocracia dice que la ley laboral es un triunfo porque elimina los contratos basura que ella misma, a través de los ‘diputados sindicales’, introdujo en la ley de Empleo.


Pero con el mantenimiento del período de prueba y la reducción de las indemnizaciones, todos los contratos se han convertido ahora en‘basura’, no solamente los ‘contratos basura’. Y en ‘más basura’ se convertirán cuando se reglamente la ley Pyme.


Es que apenas los diputados terminaron de levantar la mano para aprobar la ‘reforma laboral’, el gobierno anunció la reglamentación de la llamada ley Pyme que permite el fraccionamiento de las vacaciones y el pago en tres cuotas del aguinaldo.


Se suma otro ataque en regla contra más de la mitad de los trabajadores empleados en las llamadas empresas chicas, que no son tales ya que pueden abarcar fábricas y oficinas de hasta 100 trabajadores.


La ley Pyme permite también que se sustituya el sistema de indemnizaciones por el fondo de despido, lo que abarataría aún más el despido de los trabajadores.


Todo esto deberá continuar con la derogación de los estatutos especiales que tienen algunos gremios y con la sustitución de todo el sistema de indemnizaciones por un fondo de retiro laboral. El Ministerio de Trabajo anunció la derogación del estatuto de los porteros, para lo cual ya tiene el visto bueno de la burocracia de Santamaría.


El gobierno acaba de reconocer que nada de esto servirá para generar empleo, al anunciar que se ‘premiarán’ con el pago de menores aportes patronales a las empresas que tomen trabajadores o blanqueen a los que están ‘en negro’.


La burocracia festejó con un asado en Parque Norte la sanción de todo este arsenal antiobrero. La Alianza, por su lado, en la “Carta a los Argentinos”, plantea “promover la negociación colectiva en todos los niveles”, es decir, los convenios por empresa, para atomizar al movimiento obrero y destruir aún más su capacidad de negociación.


El Partido Obrero llama a los delegados, activistas y agrupaciones del movimiento obrero a sacar las conclusiones políticas de todo este proceso de ataques conjuntos del peronismo y la Alianza. Es decir, a formar agrupamientos independientes y un gran partido de la clase obrera.