En el día de ayer se llevó adelante la 4ta y última sesión del año en el HCD de Merlo, donde se puso a discusión un presupuesto a libro cerrado, como nos tienen acostumbrados los hermanos Menéndez.

Desde nuestra banca denunciamos, con los escuetos datos que recibimos, que el nuevo presupuesto 2024 de Merlo es la guía de un ajuste en regla del gasto municipal, que está 45 puntos debajo de la inflación respecto del presupuesto 2023 y representa una rebaja del 19,7% en términos reales. Obviamente ese recorte va a significar peores condiciones de vida para el pueblo trabajador del distrito;  menos salarios municipales, menos puestos de trabajo, menos insumos y atención en las salitas, menos obra pública y menos refacciones escolares.

El gobierno municipal se pone a tono con el ajuste que viene como correa de transmisión desde Milei a las provincias y de Kicillof a los municipios. Con esto muestran el alcance profundo del pacto de gobernabilidad y de esta confiscación histórica sobre los ingresos de los trabajadores y sus derechos, que está beneficiando a las exportadoras agrarias, mineras, petroleras, a las patronales precarizadoras, a los especuladores inmobiliarios, y todo el parasitismo financiero de la megadeuda.

La gobernabilidad ya tuvo un episodio en el HCD de Merlo en la anterior sesión, con el voto conjunto del impuestazo del 230% por parte el PJ y la bancada de Milei en el municipio. Los “liberales” resultaron ser fanáticos de los impuestos contra los pobres, del IVA que paga el indigente, de ganancias sobre los salarios. Es una confiscación clara en favor de los sectores más concentrados del país para robarle a trabajadores y jubilados.

En Argentina los presupuestos dejaron de ser un reflejo real de los montos nominales, que son imposibles de establecer con una inflación que destruye toda referencia de precios. Junto con el presupuesto de gastos y recursos, absolutamente simbólico, se votó en la misma ordenanza una veintena de artículos adicionales y una emergencia que le dan al Ejecutivo completa discrecional para ir cambiando partidas, recortando de acá para poner allá.

Desde el Partido Obrero denunciamos que el municipio nos oculta a nosotros, los propios concejales, y a todos los vecinos de Merlo el acceso a los números de la ejecución presupuestaria de los ejercicios anteriores así como del presupuesto para cada partida en específico. Un gobierno que maneja partidas de miles de millones de pesos en las sombras, mientras la realidad de los trabajadores en los barrios soporta desde hace décadas carencias fundamentales de salud, asfalto, urbanización, vivienda, educación y trabajo.

Al comienzo de la sesión, fuimos interrumpidos en nuestro homenaje a la clase obrera que salió a enfrentar el paquete antiobrero de Milei a los gritos por una patota libertaria que había ingresado al HCD para atacar las intervenciones de la izquierda y respaldar el pacto de castas entre sus representantes y el PJ.

Expresamos que nuestra banca está a completa disposición para respaldar la organización de los trabajadores y vecinos contra el ajuste de Milei, Kicillof y Menéndez. Para  luchar para que no despidan un solo trabajador estatal, que no sigan reventando el salario municipal que es de indigencia, que resuelvan de una vez la falta de urbanización, las calles de tierra que se inundan, la falta de cloacas.

Estas luchas, como la que dieron lxs trabajadorxs de la Subsecretaría de Salud Mental y sus pacientes para que no se cierren los dispositivos, son las únicas que pueden frenar la destrucción social a la que nos llevan los políticos capitalistas.

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