Miles de personas se movilizaron el lunes 18 bajo las consignas “Julio López – Santiago Maldonado: DESAPARECIDOS. El Estado es responsable” a Plaza de Mayo, bajo la convocatoria del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia. También hubo movilizaciones importantes en La Plata, convocada por la Multisectorial La Plata-Berisso-Ensenada, y en distintos puntos del país, que colocaron la denuncia de la avanzada represiva y la impunidad de ayer y de hoy.

 

La marcha central fue desde el  Congreso hasta Plaza de Mayo y contó con la participación de numerosas organizaciones de derechos humanos, políticas y sociales. El Partido Obrero y el Frente de Izquierda se movilizaron con una populosa columna, como lo han venido haciendo durante los once años transcurridos desde la segunda desaparición de Julio López, producida en 2006 luego de que diese su testimonio contra el genocida Miguel Etchecolatz y los represores que lo secuestraron y torturaron en la dictadura.

 

El kirchnerismo, que durante todos estos años le dio la espalda al reclamo por López, se ausentó una vez más de la movilización en la Ciudad de Buenos Aires, mientras que decidió realizar una convocatoria divisionista propia en La Plata.

 

Lo que la causa López nos dejó

 

En el acto frente a la Casa Rosada se leyó el documento consensuado en el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, en el cual se da cuenta del mayúsculo encubrimiento estatal en el caso de la segunda desaparición de Julio López: “Aníbal Fernández [en aquel momento ministro de Interior de Néstor Kirchner] dijo que estaría ‘tomando mate en lo de su tía’”. Cada fuerza de seguridad simuló una búsqueda por su cuenta. Lanzaron versiones y pistas falsas. Por más de nueve años, el gobierno anterior silenció la ausencia de López. Y nunca se investigó a Etchecolatz y a los genocidas que él denunció, ni a su entorno ni la pista de la maldita Bonaerense”.

 

El documento señala que “a once años de la desaparición de Julio López, estamos ante una nueva desaparición forzada: la de Santiago Maldonado, a manos de la Gendarmería”. 

 

Avanzada represiva

 

El texto leído inscribe la desaparición de Maldonado en la avanzada represiva del macrismo y los gobernadores contra los que luchan, mencionando casos como la represión en Pepsico, los allanamientos a organizaciones políticas y sociales en Córdoba y marcando que ésta “tiene un claro objetivo: avanzar con más ajuste, saqueo y una nueva reforma laboral flexibilizadora”. A su turno, señala un hilo de continuidad en este despliegue antipopular: “Preparan un proyecto para que las Fuerzas Armadas intervengan en la ‘lucha antinarcotráfico y antiterrorismo’, retomando así la senda que inició el gobierno anterior al designar al genocida César Milani al frente del Ejército”.

 

”El Encuentro Memoria, Verdad y Justicia desnuda el carácter (auto)encubridor de la versión oficial sobre los hechos del 1° de agosto en Lof Cushamen (ver nota). [A Santiago] ¡Lo detuvo y lo desapareció la Gendarmería, cuyo responsable político es el gobierno nacional, en cabeza de la ministra Patricia Bullrich Luro Pueyrredón!”.

 

La gran marcha es continuidad de las realizadas el 24 de Marzo, contra el 2×1 a los militares y por Santiago Maldonado y muestra las enormes reservas de lucha del pueblo argentino para quebrar los aprestos represivos y la impunidad.

 

Aparición con vida de Santiago Maldonado y Jorge Julio López.