La semana inicio con el anuncio del ministro de Hacienda de la provincia de un acuerdo con el gobierno nacional de un aporte de U$D 7 millones -unos $640 millones al cambio oficial- para realizar “inversiones” en educación, tecnología, ciencia y equipamiento para parques industriales. Mientras las escuelas públicas se caen a pedazos y en un número importante carecen de agua potable, electricidad o internet, sin que a los gobernantes les interese, los gobiernos del Frente de Todos y la Renovación destinan millones de pesos a asegurar mano de obra y conocimiento barato para los empresarios.

Silicon Misiones, financiamiento y mano de obra barata para los patrones

El proyecto “innovador” del Frente Renovador se trata de generar una “industria del conocimiento” donde se instalen empresas multinacionales y, mediante subsidios, financiamiento y exenciones impositivas brindados por el Estado, se genere un polo de desarrollo económico. Silicon Misiones es parte de una política integral de financiamiento a las grandes empresas y va de la mano del Parque del Conocimiento, la Escuela de Robótica y el Parque Industrial. Un financiamiento no reembolsable por $640 millones es una muestra clara de ello.

Se trata de atraer empresas asegurándole beneficios fiscales y financieros y la posibilidad de un mercado seguro con cuotas de compras del propio Estado provincial, como el caso de la Empresa LUG a la que se le garantizó la compra de más de 60 mil luminarias para la iluminación de espacios públicos provinciales y municipales. Un negocio redondo financiado con los aportes directos de los impuestos que pagamos los trabajadores.

Asimismo, uno de los puntos centrales de la “oferta” tecnológica del gobierno Renovador es la mano de obra barata, como lo reconoció el Diputado renovador Spinelli – una de las caras del proyecto-  al asegurar que empresas de Buenos Aires “buscan jóvenes en las provincias, porque allá la pelea es infernal por los sueldos y los beneficios” (Economis, 15/10/20). Si hay algo que no le importa a los renovadores son los trabajadores misioneros.

Para los trabajadores, ajustes y vaciamiento

El mismo gobierno que destina cientos de millones de pesos a asegurar las ganancias de empresarios, no hace nada para asegurar el bienestar de los trabajadores. La falta de inversión en la educación y la salud pública se puede palpar a simple vista. Escuelas sin agua, sin materiales de higiene y salud, sin acceso a internet de calidad, donde se pretende hacer volver compulsivamente a los alumnos y trabajadores de la educación cuando los casos de coronavirus van en aumento. Lo mismo ocurre con hospitales y Centros de Atención Primaria sin medicamentos ni profesionales, sobre todo en los pueblos más pequeños y en las barriadas obreras, donde además el gobierno viene tratando de despedir trabajadores contratados.

Además de privar a los trabajadores y sus hijos del acceso a los derechos más elementales, el gobierno renovador viene avanzando en un ajuste enorme por la vía salarial al proponer un aumento del 20% -en sueldos que en el mejor de los casos llegan a $30.000-, cuando la inflación de este año rondará entre el 45 y el 50%, un verdadero golpe a las condiciones de vida de los trabajadores. Todo esto con el aval de los diputados del PAyS, la UCR y el PRO que votaron “responsablemente” el presupuesto de ajuste de 2021.

La innovación industrial y del conocimiento debe estar al servicio de los trabajadores y destinada a mejorar sus condiciones de vida. Los trabajadores de la provincia debemos avanzar en la lucha para garantizar salarios iguales a la Canasta Familiar y jubilaciones del 82% móvil, la triplicación del presupuesto educativo y de salud puestos bajo control de los trabajadores, el acceso de estudiantes y trabajadores a computadoras, conectividad, materiales de estudio y todos los requerimientos necesarios para una educación integral y de calidad a todos los estudiantes misioneros.

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