En Morón, las elecciones de octubre confirmaron el resultado de las Paso: por primera vez en 14 años la lista de Sabattella sufrió una derrota contundente, perdiendo más de la mitad de su caudal electoral.

El kirchnerismo unido (Nuevo Encuentro-FpV) perdió cinco bancas, poniendo en jaque su mayoría absoluta en el Concejo Deliberante. El Frente Renovador de Malinucci, que ganó las elecciones a concejales, combina integrantes del PRO que ingresan al Concejo con parte del personal político del ex intendente menemista Rousselot. Este rejunte derechista ha tenido el apoyo de parte del PJ-FpV de Scioli e Insaurralde, con declaraciones expresas del intendente Descalzo de Ituzaingó de que votaría a la única lista "peronista" contra Sabbatella.

El Frente de Izquierda aumentó su caudal electoral. Del salto a 5.700 votos que habíamos tenido en agosto de 2011, pasamos a obtener 13.710 votos en octubre, a muy pocos votos de consagrar un concejal. Este aumento considerable tiene que ver con un desarrollo en el distrito y una lucha sistemática contra el falso progresismo de los Sabbatella.

La campaña electoral sumó adhesiones de jóvenes y trabajadores. Desde agosto a octubre duplicamos la cantidad de fiscales. En el Hospital Posadas, mi lugar de trabajo, el apoyo y la pelea, cuerpo a cuerpo, de numerosos compañeros por el voto al Frente de Izquierda fue sorprendente.

Las recorridas por fábricas, escuelas, calles, las casas electorales que funcionaron en Villa Sarmiento y en Haedo (dos de los lugares donde obtuvimos la más alta votación, arriba del 8,5%) fueron el motor de una campaña, hecha, como muchos medios locales destacaron, a pulmón. Esta intensa actividad logró un reflejo constante en los medios locales, siendo consultados cotidianamente sobre los problemas políticos como voceros del Frente de Izquierda en Morón.

En Morón, al igual que en todo el país, tenemos por delante una nueva etapa política por desarrollar.