El viernes 9 de septiembre, a las 17 hs, partirá una marcha de Congreso a Plaza de Mayo para repudiar la Cumbre de las Américas, que se desarrollará en Mar del Plata a principios de noviembre, y la presencia del genocida Bush.

Se trata de una convocatoria impulsada por una treintena de organizaciones, entre las que participa el Partido Obrero.

La Convocatoria Antiimperialista denuncia que “con el pretexto de la seguridad del terrorista Bush asistimos en Mar del Plata a una escalada de militarización y control de la población, digna de las peores épocas de la dictadura… Esto sucede con la complicidad del gobierno nacional, que ha constituido un comando conjunto de Prefectura, Gendarmería y Policía Federal incurriendo en un gasto de más de 90 millones de pesos”.

La Cumbre presidencial en territorio nacional, fue comprometida por De la Rúa y ratificada por Kirchner. Jorge Taiana, el vicecanciller, afirmo que en la Cumbre “aparecerán las diferencias” pero… “en torno de los procesos económicos de las décadas pasadas” (Clarín, 16/8). La eventual crítica a algunas privatizaciones menemistas (que Kirchner apoyó) ocultará los tarifazos que se preparan.

Ha pasado por Buenos Aires el subsecretario del Tesoro yanqui, Glaser, para reclamar del gobierno y el parlamento argentinos la sanción de diversas leyes antiterroristas. Ya hay diversos proyectos presentados, entre ellos de Stolbizer.

La cumbre de los presidentes latinoamericanos del Grupo Río que debía realizarse en Bariloche, a partir del 23 de agosto, ha sido postergada debido a que “la región atraviesa turbulencias y no son muchos los presidentes con tiempo y neuronas para hablar de los problemas” (Clarín, 18/8).

La marcha antiimperialista del 9 de septiembre —de alcances nacionales— cobra especial importancia. Es un terreno de lucha contra el opresor imperialista de Irak y Haití, y contra el gobierno pseudo nacionalista.

Los partidos del Encuentro de Rosario (PS, CTA, PI, etc.) no se suman a esta marcha. Con relación a la Cumbre de los Pueblos, que se realizará simultáneamente a la Cumbre de los presidentes, Pérez Esquivel “aclaró que no se trata de una ‘contracumbre’, sino que es otra cumbre… y negó la posibilidad de que esté asociada a la violencia”. En la organización de esta Cumbre de los Pueblos interviene la Corriente oficialista Patria Libre y el asesor oficial de la Cancillería Isaac Rudnik, ya utilizado por Bielsa y Kirchner para misiones de ‘contención’ (Bolivia).

Llamamos a votar en el seno de todas las organizaciones obreras, estudiantiles y populares por la participación en la marcha antiimperialista del 9 de septiembre y a movilizarse masivamente.

Fuera Bush de la Argentina, No al Pacto Kirchner-FMI. Fuera yanquis de Irak y América Latina. Fuera el estado policial de Mar del Plata. Retiro inmediato de las tropas enviadas a Haití. Por la Unidad Socialista de América Latina.