Se debate en la Legislatura provincial el proyecto de Presupuesto 2021. La diputada Patricia Jure del FIT-Partido Obrero, que participa en la Comisión de Hacienda y Presupuesto, tuvo un contrapunto con el Ministro de Economía, Guillermo Pons, quien fue a defender el nuevo dibujo presupuestario a la medida del FMI.

“El presupuesto 2021, que arranca con números negativos (-2.236 millones de pesos), se presenta y se debate cuando aún no se ha cerrado el acuerdo con los bonistas en dólares o declarado el default. Es una taba en el aire. No obstante, las partidas establecidas muestran un ajuste brutal sobre salarios y jubilaciones (apenas 8% contra una inflación pronosticada del 29%). Algo que ya ocurrió este año, habiendo incumplido la actualización de los salarios por IPC (planificado en un 22%), ahorrándose el Estado-patrón miles de millones de pesos en salarios. Es decir que el salario se devaluará con seguridad en un 50% entre 2020 y 2021” señaló Jure.

Y continuó: “el ministro Guillermo Pons adelantó que se mantendrá con esa tónica durante todo el año entrante. Esta austeridad salarial, por un lado, es la contracara del impulso de emisión de nueva deuda (140 millones de dólares, letras, toma de fondos de la ANSES, etc.) y del pago serial de bonos en dólares a tasas usurarias. Política que continuará con la emisión de distintos instrumentos financieros como letras ajustadas por CER o dólar link más un interés adicional. Los recursos que se presupuestan para pagar semejante nivel de endeudamiento salen precisamente del congelamiento de salarios y jubilaciones. Todas las partidas destinadas al gasto social, la educación, la salud, todas sin excepción, se incrementan por detrás de la inflación presupuestada de un 29% absolutamente mentiroso, cuando estamos a las puertas de un proceso devaluatorio y la liberación de precios de tarifas, combustibles y alimentos.”

“Lo que genera el déficit es esa deuda, no los salarios o el gasto social. Hasta el ministro lo reconoció cuando dijo que de, no pagarse la misma, habría un superávit de 21.000 millones de pesos. Sin embargo, y a diferencia del Frente de Izquierda que plantea no pagarla y aplicar un impuesto al capital para destinarlo a las necesidades más urgentes, el MPN y los bloques que votarán este presupuesto a la medida del FMI le declaran una guerra a las y los trabajadores de Neuquén.”

“Rechazar activamente este presupuesto es defender el salario, la salud, la educación, la vivienda, las casas refugio para mujeres víctimas de violencia, para la conectividad necesaria en educación, los servicios públicos y todas las cuestiones vitales de trabajadoras/es y sectores populares. Hace falta una lucha porque en la Legislatura se está cocinando un ajustazo en pandemia y pospandemia”, finalizó la legisladora del Frente de Izquierda

 

 

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