Políticas

14/1/2022

Neuquén, entre picos de contagios y de producción de petróleo

En el medio de cifras récord de contagios diarios que prácticamente duplican los picos del año pasado, y con un sistema de Salud desmantelado por renuncias de profesionales y los propios contagios Covid, el gobernador trata de presentar estadísticas que genere una atmósfera social de optimismo.

El caballito de batalla de la intentona oficial es el aumento incesante en la producción de petróleo impulsada por la extracción No Convencional (shale oil), de la cual gran parte se exporta en cantidades crecientes en la medida que los oleoductos agotan su capacidad de transporte real.

De modo que los anuncios del gobernador hay que contrastarlos con el lado B de la realidad.Cuando hacemos ese contraste surge la verdadera situación de la población neuquina.

Hospitales, Covid y actividad económica

En los hospitales la reducción de personal y las pésimas condiciones laborales han producido renuncias en varios de ellos. Siprosapune (el sindicato que agrupa a los profesionales) denunció que por maltrato y sobrecarga laboral en el hospital de Zapala y el Laboratorio Central (en situación de picos de contagios nada menos) se anticipan varias renuncias. Por su parte la Junta Interna del hospital de Cutral Có se ha pronunciado en los mismos términos y exige en un comunicado “reducción horaria y trabajo en burbujas” ante la promiscuidad en que deben desarrollar sus tareas.

Por otro lado el director del principal hospital de la provincia, el Dr. Adrián Lammel, expresó que “desde el 27 de diciembre a hoy (12 de enero), se reportaron 400 sospechosos (entre el personal), de los que fueron positivo aproximadamente la mitad”. En el término de dos semanas un 10% del personal de dicho hospital dio positivo de Covid.

Pero los hospitales no son la excepción. Como ocurre en el resto del país, los comercios están diezmados por los contagios, al punto que algunos han comenzado a cerrar sus actividades. La cámara patronal (Acipan) alertó sobre “el gran ausentismo” de sus trabajadoras/es. La respuesta oficial fue inmediata. El Ministerio de Salud en el día de hoy 12 de enero dio a conocer un comunicado por el cual “actualizó los criterios de aislamiento” y en lo sucesivo los contactos estrechos asintomáticos “no hará falta que se aíslen y podrán regresar a sus actividades laborales”. Una concesión tan propatronal como criminal para miles y miles de trabajadoras/es.

Un caso especial es la industria hidrocarburífera. Una fuente gerencial citada por el diario LMN (08/01) ha manifestado que “resulta muy complejo detener la producción de gas y petróleo por un tema sanitario”, por lo que “el cumplimiento del aislamiento por contacto estrecho se resume más rápido con el PCR negativo que se exige a cada operario que tiene su subir al campo y cumplir un diagrama de 15 días”. Cambian tiempo de aislamiento por PCR. Algo que se aplica al turismo pero que no frena los récords de contagios en las zonas turísticas.

En San Martín de los Andes hay 50 trabajadoras/es del hospital aislados y los turistas con PCR incluido aportan el 12% de los nuevos casos diarios, que ya superan los 700 contagios diarios.

Crisis hídrica y uso del agua

En una serie de artículos de Prensa Obrera se viene reflejando la crisis hídrica en la provincia y el abuso del uso del agua de los embalses para producir electricidad, aún a costa de producir una crisis mayor.

Ya es “vox populi” que el embalse de la represa Alicurá está por debajo de su cota mínima, una situación nada recomendable cuando ingresa al embalse solo el 20% del volumen de agua que se turbina para producir electricidad. Y lo mismo ocurre con las otras centrales, que a demanda de Cammesa han elevado la producción de hidroelectricidad.

Cuando el último embalse río abajo alcance su cota máxima, deberá dejar fluir agua por los aliviaderos derrochando un caudal que se debería administrar en función de las bajantes del caudal de los ríos en su trayecto inferior hacia el mar. Mientras todo esto afecta directa o indirectamente la calidad de vida de la población (nuevos barrios se han sumado a piquetes ante la carencia de agua por días) en el marco de una ola de calor.

Ningún anuncio oficial de “optimismo” puede ocultar esta realidad. Peor aún, cuando los récord de producción de petróleo que anuncia el gobierno ocultan un dato clave: esos récord no superan la producción de petróleo de la provincia de hace 20 años atrás.

Se vanaglorian, tras hablar de inversiones de miles y miles de millones de dólares, de no superar aún un volumen de barriles que ya se extraían en los primeros años de este siglo.

Neuquén, como ocurre en muchas películas de Hollywood, es una gran escenografía montada en un relato. Ningún taparrabos impedirá que más temprano que tarde la realidad se manifieste.

A organizarla.