Políticas

22/10/2019

Policía de la Ciudad reprimió el acto en el consulado de Chile

Provocación de Patricia Bullrich

Fotos: Sergio Santillán, Ojo Obrero Fotografía

El FIT-U convocó -el fin de semana- a una concentración para el lunes 21 frente al Consulado chileno que queda a metros de la Plaza de Mayo, para realizar un acto de protesta contra la represión policial-militar del gobierno de Piñera en Chile y solidarizarse con el levantamiento popular contra los tarifazos y las políticas de ‘ajuste’.


Cuando la columna del FIT-U comenzó a concentrarse frente al Consulado ya había centenares de chilenos autoconvocados que cortaban toda la Diagonal Norte y en una radio abierta venían denunciando la represión piñero-pinochetista. Se arrimaron otras corrientes (FOL, CTA, etc.).



Buenos Aires se sumaba así a las movilizaciones en todo el mundo, que también tuvieron su expresión a lo largo de la Argentina, especialmente en las ciudades más ligadas a la vecina república de Chile: Mendoza, Caleta Olivia, Bariloche, etc. En todas ellas estuvo el PO movilizado.


En la concentración frente al Consulado en la CABA se repartió una declaración nacional del PO que titulaba: “En toda Latinoamérica una misma consigna: Que la crisis la paguen los capitalistas” y, en la cual, se planteaba que “la lucha de los trabajadores da resultado: se tiró atrás los aumentos de tarifas en Ecuador y en Chile”.



Las consignas generales que coreaban los asistentes -ya unos miles- eran contra la represión y por echar a Piñeyra.


Pero la radio abierta tuvo que ser interrumpida y el acto resuelto por el FIT-U no pudo realizarse, porque se descerrajó un operativo de provocación-represión preparado al detalle por la ministra de ‘seguridad’ Bullrich. 


Gendarmes, policías con gases, motos se lanzaron a disolver la concentración frente al Consulado. En las corridas fueron detenidos 9 compañeros (el FOL denuncia la detención de dos de sus militantes) y con heridas de balas de goma y palazos mucho más.


Cuando los manifestantes organizados intentaban retroceder hacia el Obelisco, otro operativo policial cortaba la salida. Se estaba preparando una ratonera. La persecución continúo en las calles laterales con el accionar de la policía motorizada, gases y balas de goma.


En los incidentes fueron heridos y golpeados varios trabajadores de prensa. Particularmente, el camarógrafo y el periodista de Crónica lo fueron salvajemente. El PO y el conjunto del FIT-U han repudiado estas agresiones contra los trabajadores de prensa. Simultáneamente, lo estaba haciendo Néstor Pitrola desde un programa de debate que tocaba la situación chilena en el propio canal.



Para la ministra Patricia Bullrich fue la ocasión para desarrollar una campaña macartista contra la izquierda. El FIT-U fue la principal fuerza política que se movilizó al Consulado. El kirchnerismo nac & pop hizo mutis por el foro. La campaña de la Bullrich fue rápidamente tomada por los medios para atacar la ‘violencia’ -así llaman a la rebelión de la juventud estudiantil y trabajadora, acompañada masivamente por masas de trabajadores y vecinos de las barriadas de Santiago y otras provincias chilenas. Clarín on line haciéndose eco de la campaña contra la lucha de los explotados -llamada violencia- planteaba: “Como los atacantes estaban con su cara cubierta, encapuchados, fue difícil identificar si respondían a algunos de los grupos que participaron de la protesta. Aunque lo cierto es que las banderas del PTS y el PO flameaban cerca de donde transcurrieron los incidentes”.



Reclamamos la libertad de todos los detenidos. Responsabilizamos a la Bullrich y su gobierno por los incidentes represivos.


La respuesta política a la provocación represiva ésta planteada en que este jueves 24, a las 18 horas, la mesa nacional del Frente de Izquierda, decidió realizar su acto de cierre de la campaña electoral frente al Consulado chileno. Seremos miles en este acto que no solo se solidarizara con la lucha del pueblo chileno, sino que estará simbolizando la actitud de la izquierda que se reclama independiente frente a la política de entrega y ajuste que el gobierno Macri viene desarrollando y que Alberto Fernández piensa continuar agregando el freno a la lucha obrera del ‘Pacto Social’.


¡Que la crisis la paguen los capitalistas!