Políticas

7/7/2007|899

Por todos lados salta la mierda


La comisión electoral del Congreso del Partido Obrero del Interior de la Provincia de Buenos Aires constató la profunda crisis que hace de los municipios el eslabón más débil de la crisis provincial.


 


A continuación transcribimos un resumen del informe de la comisión y las denuncias de los compañeros delegados de los distritos.


 


En La Plata, Alak viene cargándoles a los platenses el pago de los créditos truchos que vaciaron y quebraron al Banco Municipal, y ha destruido el sistema de transporte, incomunicando a las barriadas.


 


El municipio de Lomas de Zamora ha hecho un acuerdo con la Cámara de la Construcción para conchabar a los desocupados en el plan de viviendas en condiciones de absoluta precariedad y desprotección laboral.


 


En Zárate, el duhaldista Bernúes quiere apoderarse de la caja negra que maneja la cooperativa para quedarse con el cobro de los servicios, pero ha quedado contra las cuerdas por el rechazo de la población y la agudización de la crisis en el propio bloque del PJ.


 


En Pehuajó el intendente felipista Macheroni quiere meter las manos en la Cooperativa Eléctrica, una especie de intendencia paralela que tiene un presupuesto millonario y ha sido el foco de grandes negociados, y ha hecho un acuerdo con el supercorrupto Martín, de la Cooperativa.


 


En Bahía Blanca llueven denuncias contra el felipista intendente Lopes, a quien el propio bloque del PJ le quitó el apoyo, y que posiblemente sea uno de los gobiernos municipales más corruptos de la provincia.


 


En Tres Arroyos, la Intendencia “vecinalista” aparece comprometida en un caso de corrupción, prostitución e ilícitos que ya le ha costado la cabeza a un comisario.


 


El diputado provincial Astorga, del PJ, tiene pendiente su desafuero por casos de corrupción en la intendencia de Puán, que afectan a la totalidad de los ex funcionarios del gobierno comunal.


 


En Junín se “omitió” casi un millón de pesos del balance de gastos que el intendente mandó al Concejo Deliberante.


 


En Coronel Suárez, la Intendencia de Moccero, otro aliado “vecinalista” del gobernador Solá, actúa como gestor de Gotelli generalizando el trabajo en negro y tercerizando la producción de Indular con planes de 200 pesos la quincena.


 


En Saavedra, el intendente radical se ha hundido después de la represión a los obreros de la cooperativa de la ex Gatic, y en Casares otro radical gobierna a cuenta de la oligarquía sojera de los Grobocopatel.


 


Y no menos importante, en Ensenada el intendente Secco, reciente adquisición de Solá, ha salido a enfrentar a los vecinos, que a piquete limpio están impidiendo que se haga de la comuna un megabasurero del Ceamse.


 


Como se ve, del gallinero sale mucha mierda.


 


A este régimen de mafias y punteros opongámosle la organización de las barriadas y las comunas.


 


La lucha por una alternativa obrera y socialista en las comunas plantea enfrentar la corrupción, la entrega y el saqueo capitalista y la apertura de los libros, el control obrero de las cuentas y la expulsión de las camarillas de los Solá, los Duhalde y sus sponsors patronales.