La clase obrera argentina llega a este 1° de Mayo en medio de importantes ataques contra sus conquistas históricas por parte del gobierno de Macri, que los trabajadores están enfrentando con importantes luchas en todo el país. Más de 130.000 despidos de compañeros estatales y privados; tarifazos de entre el 200 y el 500% en los servicios y en el transporte público y la pretensión de imponernos paritarias a la baja, son algunas de las expresiones de esta escalada del gobierno macrista, que acompañan desde las provincias los gobernadores del PJ, del kirchnerismo e incluso de los llamados “socialistas”. La situación que ha dejado el gobierno kirchnerista -después de una década de pago serial de la deuda externa, subsidios a grupos capitalistas y fabulosas ganancias a las multinacionales y sojeros- pretende ser trasladada integralmente a los trabajadores y al pueblo. Ese ajuste pergeñado por el gran capital, y que acompañan todos los partidos patronales, es la garantía que se le ha ofrecido a los banqueros usureros y al imperialismo después del acuerdo con los fondos buitre, que -con excepción del Frente de Izquierda- han suscripto todos los bloques del Congreso. 

 

El “Panamá Papers” y los casos de corrupción en los que están implicados tanto Mauricio Macri como Cristina Fernández y varios de sus ex funcionarios, son la expresión de una clase social decadente -la clase capitalista- que históricamente se ha servido de las arcas públicas para enriquecerse y que utiliza los “paraísos” fiscales para evadir o eludir el pago de impuestos, mientras que a las clases populares se las castiga con ajustes feroces.

 

En oposición al ajuste y a la entrega nacional, bendecido por Obama con su visita al país, es la clase obrera la que se comienza a levantar y hacer oír su voz, como ocurrió con los trabajadores de Cresta Roja, del Grupo 23; los estatales y docentes de Tierra del Fuego, Santiago del Estero, Córdoba, Mendoza, Santa Cruz, Capital (en especial los trabajadores del Ministerio de Economía y de Trabajo) que se han manifestado con huelgas y marchas multitudinarias. La burocracia sindical, en todas sus vertientes, ha dado las espaldas a estas luchas y rechaza el camino de una medida nacional de lucha de los trabajadores contra el ajuste. El acto que preparan las CGT para el próximo 29, sin que esté acompañado de un paro nacional y puesto al servicio de una posible reunificación de los que no están apoyando las luchas actuales, apenas apunta a descomprimir la enorme inquietud obrera frente a la carestía, los tarifazos y despidos. 

 

Frente a este cuadro, el Frente de Izquierda convoca a concretar un Primero de Mayo de lucha, que levante las reivindicaciones del momento junto al reclamo de un paro general activo del movimiento obrero. 

 

Este primero tendrá lugar en medio de episodios políticos decisivos, en el país y en América Latina.  El final de la experiencia kirchnerista es parte del derrumbe de los gobiernos “nacionalistas” o “progresistas” que estuvieron lejos de emancipar al continente del atraso y la opresión imperialista como intentaron hacer creer, manteniendo todo el esquema privatizador y la precarización laboral del neoliberalismo  y dando lugar a nuevos gobiernos, como el de Macri, que pretenden trasladar la crisis a los trabajadores y al pueblo mediante brutales ajustes que profundizan la miseria social. Solo la clase trabajadora podrá acaudillar a nuestras naciones para liberarlas del yugo del capital imperialista y para que la crisis la paguen los capitalistas.

 

En ese cuadro, la izquierda revolucionaria tiene la gran responsabilidad de asumir el liderazgo político de la lucha contra los ajustadores. Esa lucha deberá acentuar nuestra diferenciación de fondo con los todos los partidos patronales, incluyendo el kirchnerismo que también está aplicando el ajuste allá donde gobierna (Tierra del Fuego y Santa Cruz) y el Frente Renovador de Massa, que acompañó a Macri en sus principales medidas antinacionales y antipopulares.

 

El Frente de Izquierda se constituyó, en la etapa anterior, como polo por la independencia política de los trabajadores -precisamente, cuando el kirchnerismo se empeñaba en someter a las organizaciones obreras y populares a la cooptación y la regimentación. En la lucha contra el actual gobierno ajustador, llamamos a reforzar ese polo político de izquierda, anticapitalista y socialista que es el FIT, para que los trabajadores podamos imponer una salida propia ante los  grandes episodios de lucha y crisis políticas que están por venir.

 

Con esta comprensión común, el Frente de Izquierda convoca a los trabajadores y a todas las fuerzas que nos han apoyado , a los sindicatos, comisiones internas y delegados del clasismo, a los centros y el activismo estudiantil que lucha contra las camarillas universitarias y al movimiento de desocupados  a concretar un gran acto del primero de mayo de lucha, obrero, socialista e internacionalista en Plaza de Mayo con las siguientes banderas: 

 

– Abajo el plan de ajuste y de entrega de Macri y los gobernadores

– Por la prohibición de despidos y suspensiones. Aumento salarial de emergencia para todos los trabajadores en pos de alcanzar el valor de la canasta familiar. Abolición del impuesto al salario. 

– Por paritarias libres.  82% móvil y aumento de emergencia para los jubilados.

– No a la tregua de la burocracia sindical. Por un paro nacional de todo el movimiento obrero. 

– Abajo el tarifazo. Abajo el pacto buitre. No pago de la deuda externa ilegítima, fraudulenta y usuraria.

– Abajo el protocolo represivo. 

– Por la independencia política de los trabajadores respecto de los partidos capitalistas. 

– Por el gobierno de Trabajadores. Por la unidad socialista de América Latina.