Políticas

1/7/1987|188

¡Qué eficiente que es la patronal!

La Secretaría de Comercio anunció la implementación de los 10 primeros programas de exportación. La información señala que se otorgarán “reintegros a las empresas exportadoras y a través del Banco Central 96 millones de dólares de créditos en concepto de prefinanciación” lo que posibilitará “131 millones de dólares de exportaciones nuevas” (El Cronista, 26/6).

No hay que ser muy astuto para darse cuenta de que el Banco Central financia todo el proceso de fabricación y exportación ya que entrega 96 millones de dólares para exportar por 130 millones de dólares, y esto a tasas de interés subsidiadas. Encima se dan reintegros del 15 %, que equivalen a 20 millones de dólares. Pero eso si, los beneficios se los llevan los llamados industriales, que no ponen ni un peso. Como, además, las prefinanciaciones se entregan varios meses antes de concretada la exportación, estos industriales utilizan este crédito barato para represtarlo a tasas de interés superiores a las que les cobran a ellos, cómo se comprobó con los “redescuentos” del Banco Alas o del Oeste.

Conclusión:

La burguesía industrial es una clase parasitaria, pues vive de los fondos del Estado; no cumple ningún rol progresivo, por lo que debe ser eliminada del escenario histórico.