Cuando el gobierno sacó el decreto 292, por el cual dejaba de atender en el PAMI a los beneficiarios no contributivos, dijo que lo hacía para sanear las finanzas del PAMI, que estaba en déficit. Pero, a continuación, el presupuesto que está en manos del Ministerio de Economía, manejado por el ministro Cavallo, redujo aún más el dinero destinado a cubrir a los beneficiarios no contributivos.

Sin embargo, el lunes, en el diario La Prensa, salió que el PAMI debe 32 millones de dólares a los prestatarios, por lo que cesarán la atención a todos los jubilados si no se les paga.

Nosotros tenemos que decir que las prestadoras se han beneficiado robando al PAMI y que ningún jubilado debe quedar sin atención. Que es falso que hay déficit. ¡Que se abran los libros del PAMI para saber cómo esas empresas se han  beneficiado con esas prestaciones y con los chanchullos de Cavallo!