Políticas

15/5/2017

Ramal: “Esta es una crisis política de fondo”

Publicado en trascarton.com.ar

Trascartón


 


En una charla abierta en el Centro Cultural y Político del Partido Obrero, ubicado en Magariños Cervantes y Nicasio Oroño, el legislador porteño por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) Marcelo Ramal manifestó su punto de vista sobre la crisis policial que se desató en la ciudad con la detención, el procesamiento y la posterior renuncia del comisario general José Potocar.


 


“Esta policía de la ciudad, que fue creada el año pasado y que fue votada por todos los bloques menos por el Frente de Izquierda, es una chapa y pintura de la vieja policía federal de los 53 comisarios sospechados por corrupción. Lo que hicieron fue pintarle los chalecos, cambiarle el nombre, ponerle un gorro diferente y llamarla ‘nueva policía de la ciudad’”, señaló. Luego puntualizó que “esa ‘nueva policía’ tiene denuncias referidas a la extorsión a comerciantes, vendedores ambulantes, atropellos contra los jóvenes, torturas a jóvenes en la Villa 21-24 el año pasado, a chicos que fueron detenidos y los llevaron al borde del Riachuelo, la represión a los maestros en la carpa de la Plaza Congreso, a las compañeras que pintaban por el paro internacional de la mujer y luego en la propia jornada del 8 de marzo, donde también hubo represión, y nosotros intentamos discutir todo esto en la Legislatura y se nos bloqueó permanentemente. Pero después de todos los bloqueos que hubo salió a la luz, como resultado de un ajuste interno, que el jefe de esa policía era el que articulaba toda una red de extorsiones y de coimas”, por lo que “tuvieron que traer funcionarios del Ministerio de Seguridad a la Legislatura, tuvieron que soportar una interpelación, y el tema de la seguridad y de la policía se empezó a discutir adentro de la Legislatura”.


 


En relación a los presidentes de los otros bloques en esa discusión, Ramal manifestó que les señaló que “en realidad, la corrupción es la prebenda, es el ‘vuelto chico’ para que ese aparato lleve adelante la tarea de la represión y que, por lo tanto, había que discutir la represión. ¿Saben lo que me contestaron? Esta comisión no es para discutir situaciones de represión”. Dijo además que “la presidenta de la propia Legislatura, que estaba muy enojada conmigo, me dice: ‘Usted viene a esta comisión a sembrar la desconfianza en las instituciones’, a lo que respondí: ‘Señora, le agradezco su intervención y su enojo, usted ha definido perfectamente lo que el PO y el FIT vienen a hacer a esta comisión y a esta Legislatura. Usted, señora presidenta, no tendría que preguntarse por mi desconfianza. A usted le tendrían que llamar la atención no los que desconfían sino los que confían. Mi desconfianza es completamente fundada”.


 


Seguidamente, Ramal recordó que “cuando se votó esta creación de la nueva policía el año pasado, estaban realmente de fiesta. Pensaban que habían llegado al final de la autonomía porteña. La ciudad tenía su propia policía. Claro, hubo un pequeño detalle: la ley original decía que esta ‘nueva policía’ iba a ser dirigida por un civil. En la sesión donde se votó, casi tachándolo con la mano, se armó una enmienda transitoria de que por ahora iba a ser dirigida por un policía, que era justamente el comisario Potocar. Esa fue la señal de que esa policía nació como resultado de un pacto político con la vieja federal. Si no admitían que un federal dirigiera, esta policía no se creaba. Es decir que no hubo ninguna ‘nueva policía’, no hubo ninguna autonomía, sino que tuvieron que aceptar virtualmente que continuara toda la vieja estructura de los comisarios, inclusive con todas las causas que habían recibido”.


 


Ramal concluyó con que “esta es una crisis política de fondo que ahora la quieren emparchar de alguna manera. Inclusive en la propia Legislatura están buscando cómo emparcharla con mecanismos correctivos que no van a poder encontrar, porque la naturaleza de la función policial está totalmente relacionada con el carácter y la orientación social del Estado al cual sirve. Un Estado que necesita de la función policial principalmente para actuar contra las familias que no tienen vivienda; contra los barrios como la Carbonilla, que tienen gravísimos problemas en lo que tiene que ver con el reclamo de la urbanización y de obras que no se hacen; una policía que tiene que actuar amedrentando a los jóvenes, actuando siempre una función represiva y por esa función se arroga la posibilidad de manejar sus cajas especiales y recibir el ‘vuelto chico’ de un Estado que en general confisca a toda la población”.


 


En la charla, que se realizó en el marco de la celebración del primer aniversario del local en el que tuvo lugar, participó también la dirigente nacional del Partido Obrero Vanina Biasi.