Políticas

10/12/2015|1393

Reclamemos el doble aguinaldo y paritarias en Enero


Foto: Federico Imas


 


El meneado “bastón de mando” todavía no pasó de manos.


 


Pero los monopolios alimentarios ya están dictando su salida a la crisis: la carne aumentó un 50% en cuestión de semanas. Lo mismo ocurrió con el pan. El pollo lo hizo en más de un 30%.


 


El gobierno que se va y el que viene se culpan por los aumentazos.


 


Pero la carestía progresa en las barbas de todos ellos.


 


La devaluación ha sido la señal de largada para los aumentos.


 


Mientras tanto, al debatirse los presupuestos provinciales y municipales se votan impuestazos, con los votos del kirchnerismo y de Cambiemos.


 


Mucho antes de las paritarias, el bolsillo popular ya ha sido recortado por un zarpazo.


 


Es lo que han comprendido los aceiteros de Rosario, que reclaman un bono extraordinario de fin de año de cara a la carestía.


 


Es lo que han arrancado los papeleros de Quilmes.


 


Es el reclamo que comienza a extenderse en grandes concentraciones obreras.


 


La burocracia sindical discute con el gobierno una agenda muy distinta: la de sus propias prebendas, la de sus puestos en la futura administración estatal.


 


A cambio de ello, nos quieren vender un “acuerdo social” que ponga los salarios en un cepo. Pero convalide, en cambio, los aumentos de precios de estos días.


 


Necesitamos deliberar y poner sobre la mesa nuestro pliego de reclamos: por el bono extraordinario o el doble aguinaldo a fin de año.


 


Por el adelantamiento de las paritarias a enero, con representantes y mandatos resueltos en asamblea. Prohibición de suspensiones y despidos.


 


Aumento de emergencia para jubilados. Indexación mensual de los salarios.


 


Realicemos plenarios y congresos de trabajadores para debatir un programa y un curso de acción contra el ajuste.