En la cuenca carbonera de Río Turbio, ha estallado una lucha que puede ser histórica: los jóvenes sin trabajo de la localidad –en su mayoría hijos de mineros, con edades que oscilan entre los 19 a 25 años– han ocupado el jueves 5 de agosto la administración de YCRT en reclamo de su incorporación como trabajadores a la empresa.

La lucha, iniciada por un grupo de 20 jóvenes, encontró rápidamente el apoyo de la comunidad cuando la Gendarmería intentó impedir el paso de alimentos a los muchachos que están adentro. Casi espontáneamente, los vecinos y muchos otros jóvenes desocupados cortaron la ruta de acceso a la ciudad, muy cerca de la administración y, más tarde, otros grupos de desocupados cortaron también el cruce de Julia Dufour. En pocas horas se estableció una coordinación entre los cortes, y el padrón de compañeros que reclaman el ingreso a trabajar pasó de los primeros 20 a 238, entre ellos unas 15 mujeres.

Las colas de vehículos llegaron a tener seis kilómetros y la actividad de la mina quedó paralizada por los cortes, que sólo se abrieron un par de veces por día.

Las presiones del poder sobre estos jóvenes, han fracasado por completo.

ATE no ha adoptado ninguna medida concreta de lucha. En lugar de ponerse al frente del reclamo, se pone como intermediaria entre el gobierno provincial y los jóvenes.

Los intendentes de la zona y el director de YCRT se suceden en reuniones sin ningún resultado. Las promesas con las que pretenden levantar las medidas de lucha son vagas ideas de que, en la medida de lo posible, “se irán incorporando”.

Los jóvenes han establecido un petitorio muy claro: no van a levantar las medidas hasta que se firme una fecha concreta de ingreso de todo el padrón y un subsidio para aquellos casos en que la incorporación no fuera inmediata.

La cuestión se combina con una fuerte interna en la situación de la empresa, donde ATE intentaría colocar un hombre de la burocracia al frente y se ha visto sorprendida por un reclamo surgido de los propios hijos de los mineros.

Los cortes se han flexibilizado por el fin de semana, pero podrían volver a endurecerse las medidas a partir del lunes 9.

El Partido Obrero-FUT ha estado desde el primer momento acompañando esta gran lucha que conmociona a la región.