Políticas

13/3/2003|792

Romero, “Soldadito de Bush”

El candidato a vice de Menem, Romero, acaba de pronunciarse a favor de la intervención militar norteamericana en Irak (El Tribuno, 20/2). Es claro que el duhaldismo apoyará económicamente la guerra a través del pago de la deuda externa y del pacto con el FMI, pero la fórmula privatista que secunda Romero quiere ir más a fondo.


Romero es un lobbista de las petroleras. Por eso rechaza el aumento de las retenciones a la exportación de crudo, por eso fue primero a presentar su programa de gobierno a los Estados Unidos. Por eso quiere la guerra contra el pueblo de Irak y contra el propio pueblo salteño. Como ejemplo de esto último tenemos el enorme despliegue de la policía provincial, mil efectivos, para desalojar a los ocupantes del barrio Parque La Vega, o la masacre de los ocupantes del barrio Fonavi en Tartagal, con heridos de bala como el compañero Valdivia. No debemos olvidar las cinco muertes de piqueteros en el norte provincial y los procesamientos a los principales luchadores populares de la provincia.


Por si quedaba alguna duda, Romero manifestó en el acto de inauguración de un local partidario que si gana va a trabajar para “devolver la gobernabilidad que se perdió cuando llegó la Alianza; porque no se frustren mandatos, no haya desorden ni falta de límites…” (El Tribuno, 4/3).


El Partido Obrero de Salta tiene el enorme desafío de ser la dirección de los salteños para echar a los gobiernos que apoyan la guerra, como el de Romero-Wayar. Por eso se movilizará en la campaña electoral junto a sus candidatos a presidente y vice, Jorge Altamira y Eduardo Salas, por el repudio a la guerra y a la deuda externa, y por la autodeterminación de los pueblos.