Políticas

24/1/2013|1255

Rosario: Una ciudad de grandes contrastes

Publicado en Tiempo Argentino, 6/1

Rosario es una ciudad dominada por una gran especulación inmobiliaria, que se desarrolla por grandes grupos financieros volcados a captar los dólares de la soja y dedicados a lucrar con los terrenos del ferrocarril, que luego de la privatización menemista pasaron al municipio, quien los entregó por “chauchas y palitos”, fundamentalmente a partir de los sucesivos gobiernos del Partido Socialista de esta ciudad, que dirige desde hace más de 20 años.


La construcción de megatorres, shoppings, marinas, exclusivos bares y restaurantes, etcétera, en los terrenos de la costanera centro-norte de la ciudad, por parte de estas “inmobiliarias”, al mejor estilo de Puerto Madero de Buenos Aires (se cotiza a U$S 5000 el m²) ha acaparado los presupuestos públicos de la ciudad, para la construcción de las obras de infraestructura que necesitan y por contraste ha provocado la expulsión de una parte de la población hacia la periferia, condenada a vivir sin las condiciones mínimas.


Esta especulación inmobiliaria, es la responsable también de la suba exorbitante de los alquileres y de los valores de las propiedades, que hacen imposible el acceso a la vivienda para la mayoría de los trabajadores. Como paradoja, en un diario de la ciudad se señalaba, hace unos días, que existen más viviendas vacías que los registros de los que la necesitan. En mi gremio, AMSAFE Rosario, la Comisión de Vivienda, que ha realizado un arduo trabajo, todavía sigue esperando, después de varios anuncios, la adjudicación de las escasas 104 viviendas destinadas a los docentes, en la llamada zona cero (el km 1 de la autopista Rosario- Santa Fe).


Un programa, desde el punto de vista de los trabajadores, debe contemplar la construcción de un plan de viviendas populares y de obras públicas para evitar el flagelo de las inundaciones, financiado por un impuesto a los grupos capitalistas y con control de los vecinos.