En San Juan, en solo cuatro años, la izquierda duplicó su caudal electoral en las legislativas del 2021. Se impuso el peronismo por 43,46% frente a Juntos por el Cambio, que obtuvo el 42,22%

Este domingo 14 de noviembre, los trabajadores sanjuaninos se volcaron a las urnas en defensa de sus derechos, consolidando la elección de candidatos clasistas, en un histórico 5,7 % de los votos positivos para el Frente de Izquierda de los Trabajadores-Unidad

Este resultado se da en una provincia con empleo precarizado, salarios promedios en la línea de pobreza, barrios que no cuentan con alguno de los servicios esenciales, como es el acceso a la red domiciliaria de gas, cloacas, agua potable y en un marco de crecientes luchas organizadas de asambleas ambientalistas, barriales y de trabajadores autoconvocados que no se ven representados por sus dirigencias burocráticas.

Mientras, Uñac, en contraposición, intenta mostrar una provincia ordenada y moderna, con obras como el estadio del Bicentenario, el velódromo, la licitación de la ciudad judicial, ocultando que aún no termina de dar respuestas habitacionales a las familias afectadas por el terremoto de enero del 2021.

Lo cierto es que desde el año 2017, fecha de la última votación legislativa, perdió un 18,91 % de sus votos (disminución en su variación porcentual) en la totalidad del distrito electoral de la provincia, además de perder tres Departamentos en manos de Juntos por el Cambio: Iglesia, Capital y Santa Lucía.

El peronismo, por primera vez en 20 años de gobierno continuo en San Juan, ganó solamente por una diferencia de 1,3 % de votos, pobre victoria para un Frente que usufructúa a su gusto el manejo del aparato estatal desde hace dos décadas.

A su vez, Juntos por el Cambio, con las mismas propuestas flexibilizadoras, por megaminería y de ajuste del Frente de Todos, logró sumar a sus propios votos, los de partidos de derecha y centroderecha que en el 2017 fueron por separado y en el 2021 se unieron a este Frente, concretando así su mejor elección en la provincia, aumentando en un 33,88 % (aumento en su variación porcentual de votos) y situándose en segundo lugar bajo el Frente de Todos.

En cuanto al Frente Consenso Ischigualasto, que tomó fuerza con un discurso anticorrupción contra el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, si se comparan los votos que alcanzó este año con la suma de los votos que obtuvo en las legislativas de 2017, en partidos y/o frentes en los que se presentó por separado, bajó su caudal de votos en un 28,86 %. Cabe aclarar que los partidos que integran Consenso Ischigualasto se conformaron como frente para estas legislativas luego del rechazo de Juntos por el Cambio a sumarlos a su fuerza.

Solamente la izquierda, comparada con el 2017, aumentó su caudal electoral en un 108 % (aumento en su variación porcentual de votos), demostrando el acierto en su estrategia frentista y evidenciando que es el único frente en que los trabajadores ocupados y desocupados, asambleístas ambientales, jóvenes, disidencias y mujeres encontraron una herramienta para luchar en defensa y conquista de sus derechos.

De esta manera se consolida el Frente de Izquierda de los Trabajadores-Unidad, que en la jornada electoral contó con el esfuerzo militante de los compañeros del Polo Obrero, asambleístas, trabajadores, estudiantes, que defendieron el voto y fiscalizaron hasta el momento de la entrega de los certificados del escrutinio.