Políticas

18/7/2024

San Martín de los Andes: impuestazos y tarifazos a los usuarios

El impacto de la motosierra de Milei y el Pacto de gobernanza de Figueroa, los pagamos los trabajadores/as.

Tarifazos San Martín de los Andes.

El pacto de gobernanza impulsado hace un tiempo atrás por el gobernador neuquino, al que adhirió en febrero el intendente de San Martín de los Andes, Carlos Saloniti del MPN, y al que se alineó el Concejo Deliberante local, tiene fuertes consecuencias en los bolsillos de los/as trabajadores/as sanmartineses.

En ese pacto los municipios se comprometieron a “aumentar la recaudación propia” (punto 12) y a tomar “medidas que contribuyan y generen recursos tendientes a mantener el servicio de transporte que se presta dentro de cada jurisdicción” (punto 13).

En este marco, el intendente de San Martín de los Andes, Carlos Saloniti (MPN), implementó un impuesto especial, denominado “tasa vial”, que pagan los automovilistas por cada litro de combustible que consumen, que apunta a compensar la quita de los subsidios al transporte urbano de parte del gobierno de Milei. Otra medida a la que se ha apelado es el aumento del precio del boleto, con la excusa de impedir que la empresa abandone el servicio.

Esto cuando ya en marzo el municipio había solicitado un crédito a la provincia por 350 millones de pesos para enfrentar la falta de subsidios nacionales al transporte público de pasajeros y garantizar la continuidad del servicio. Acto seguido aumentó el boleto en un 18,7% (de $ 671 a $ 797).

Un barril sin fondo

Pero fiel al compromiso de “aumentar la recaudación propia” del pacto de gobernanza firmado a inicios del año con el gobierno provincial, el municipio ha instrumentado nuevas fuentes de recaudación que recaen sobre el bolsillo popular.

A la ya comentada “tasa vial” que pagan los automovilistas como un sobreprecio sobre el litro de combustible y que el intendente justifica en que “los que tienen auto en forma solidaria financian a los que deben usar colectivos”, se suma un sistema de radares para multas de tránsito y el estacionamiento medido, como otra medida de “solidaridad”, pero sin privarse de aumentar otra vez el boleto (lo lleva a $970) y de pedir un aporte reintegrable al gobierno provincial.

El acuerdo estipula un aporte reintegrable de más de $500 millones, para pagar deudas a la empresa de transporte, que se compensará con nuevos aumentos de tasas que pagan todas y todos los sanmartinenses.

La empresa, beneficiaria de tanta “solidaridad” que brinda el servicio es Expreso Los Andes, un sello controlado por la verdadera dueña del negocio que es Expreso Colonia.

El municipio se encarga del cobro de los boletos y los subsidios y le paga al concesionario un valor por kilómetro recorrido, que se actualiza trimestralmente con una tasa que se obtiene de la variación del índice de precios del combustible, insumos y salarios, que por supuesto que se traslada a los usuarios.

Un servicio con tantas prebendas no funciona siquiera adecuadamente, ya que sus recorridos discriminan sectores de la ciudad alejados, y no cuenta con las frecuencias necesarias, incluso dejando a estudiantes de escuelas nocturnas sin transporte para volver a sus casas.

Además son recurrentes los cortes de servicio, en una especie de lock out patronal, donde los trabajadores actúan como un factor de presión para que el municipio le pague a la empresa, y así esta pague los salarios.

Esto contrasta con los recientes anuncios con la presencia del director de transporte de la provincia Juan Alberto Ciarrocca, de la implementación de un servicio al cerro Chapelco, el centro de sky local, con tres flamantes unidades nuevas con una tarifa de $4.500, se priorizan las ganancias de los empresarios del turismo mientras tanto hay barrios enteros que aún esperan que se los incorpore al recorrido. Está claro que intereses priman.

Una orientación social contra las y los laburantes

En noviembre del año pasado los estudiantes de la localidad protagonizaron una gran lucha por el boleto educativo gratuito y lograron arrancar esta reivindicación, pero acto seguido el Concejo Deliberante aprobó que se sostendría con la tasa vial ya comentada, es decir que somos las y los trabajadores quienes pagamos todos los impuestazos y tarifazos para sostener las ganancias de la empresa.

Como forma de chantaje el intendente afirma que sin impuestazo y sin tarifazo y sin los subsidios el pasaje podría llegar a los $2.400. Hay que resaltar que las empresas de transporte urbano y suburbano de pasajeros reciben sustanciosos subsidios del estado provincial según Decretos 119/24, 231/24, 356/24, 506/24 y 652/24.

Estos beneficios empresarios con “la tuya” son un escándalo en una ciudad donde los contrastes sociales son muy grandes, con trabajadores/as en condiciones climáticas adversas, precarizadas/os, con una fenomenal crisis habitacional que los expulsa a zonas alejadas, que viven en condiciones de hacinamiento, y en zonas peligrosas por su ubicación en laderas de cerros. Y encima los tarifazos les pulverizan los salarios.

Hay que rechazar todo tarifazo. Exigir la apertura de los libros de las empresas al control de los trabajadores y usuarios. Eliminar el parasitismo empresario que tiene la rentabilidad garantizada con fondos estatales por kilómetro recorrido. Sostener el funcionamiento del sistema y un servicio de calidad con aportes progresivos de los grandes grupos económicos beneficiados con la inflación, la devaluación de la moneda y las exenciones de impuestos.

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