Políticas

21/4/2016|1407

Santa Cruz: construimos una enorme marcha ¿Cómo seguimos?

La llamada marcha de los 10.000 en Río Gallegos, el pasado 14 de abril ha tenido una importante repercusión nacional, en medio de las luchas contra el ajuste y los procesos por corrupción que afectan al clan K y a sus amigos. Ha sido un salto en la unidad de nuevos sectores que se van sumando a la mesa de unidad sindical


La llamada marcha de los 10.000 en Río Gallegos, el pasado 14 de abril ha tenido una importante repercusión nacional, en medio de las luchas contra el ajuste y los procesos por corrupción que afectan al clan K y a sus amigos. Ha sido un salto en la unidad de nuevos sectores que se van sumando a la mesa de unidad sindical.


 


Si el 1 de marzo cuando echamos a La Cámpora de las puertas de la Cámara, decíamos que los sindicatos se habían colocado en el papel de oposición política en Santa Cruz, podemos decir ahora que la marcha del 14 que triplicó la anterior, confirma la irrupción de la clase obrera en la crisis política provincial.


 


El programa de la movilización expresa un planteo de independencia de clase, en la medida que reclama contra el ajuste K, pero también contra el ajuste de Macri y de los intendentes radicales. En ese aspecto también se avanzó desde el inicio de las sesiones legislativas. De hecho, se instaló en los discursos de la marcha el reclamo de un paro nacional contra el ajuste.


 


En lo inmediato si el gobierno logra cerrar un acuerdo en la paritaria central por 1.500 pesos de aumento con UPCN y Apap, esto podría desatar una rebelión de los estatales acaudillada por ATE y a la que podrían sumarse los municipales. Todos los gremios están reclamando un piso salarial de 16.500 pesos, mientras que las ofertas oficiales apenas llevan el mínimo a 9.000.


Adosac reunió su congreso en la zona norte para votar nuevos paros y en la semana se reunirán de nuevo paritarias de casi todos los gremios.


 


Los ritmos de cada conflicto siguen siendo distintos, y en algunos casos las conducciones se esfuerzan en diferenciarlos, lo que ha llevado a que luego de la gran marcha no se haya logrado votar un plan de lucha en común en la mesa de gremios ni siquiera como propuesta a ser llevada a los cuerpos orgánicos de cada sindicato, como propuso nuestra Coordinadora Sindical Clasista.


Por su parte la policía, que tiene una suerte de paritaria, ha reclamado el 45% de aumento en negociaciones que permanecen en secreto. El tema es de la mayor importancia en medio de la tensión política que existe ya que pone en crisis la capacidad de contención del poder K.


 


El sábado 16 realizó su plenario la Coordinadora Sindical Clasista de Río Gallegos y resolvió lanzar una campaña por asambleas y plenarios de bases conjuntos en cada localidad y por la concreción de un paro al menos provincial el 29 y un gran acto callejero el 1° de Mayo en esta capital.


 


Si la clase trabajadora irrumpe, se trata de hacer consciente este papel y desarrollar la deliberación popular en cada lugar de trabajo, en cada asamblea, en cada plenario acerca de la salida política a la crisis de la provincia, partiendo de sostener los derechos y conquistas de los trabajadores, hasta desmantelar el régimen impuesto hace tantos años por el clan K a través de una Asamblea Constituyente.