Políticas

21/7/2005|909

Santiago del Estero: Más que nunca, por un frente cien por cien de izquierda

La experiencia de las elecciones santiagueñas son un banco de prueba para un frente cien por cien de izquierda en todo el país.

Solamente la izquierda creció de manera neta en estas elecciones. El PO más que duplicó los resultados de febrero, mientras que el MST subió un 80% (9.066 votos sobre un poco más de 5.000). En la discusión frentista, el MST se había opuesto a la formación de un frente cien por cien de izquierda con el argumento de abrir el frente a los sectores que estarían rompiendo con los partidos tradicionales. Trajeron a Cafiero a Santiago, a una provincia donde no tiene un solo seguidor, para imponer la política del frente clerical al interior del MST, a su base. Cafiero no les arrimó seguramente ningún voto, pero sí agregó confusión al panorama político.

Todo esto no resulta gratis en política. En el plano programático, el MST eliminó cualquier planteo de delimitación con el clero (que en Santiago tiene tanto poder como las mafias de los Ick y los Curi), y las demás formulaciones no superan el horizonte del nacionalismo pequeño burgués. El MST insistió en su denuncia contra el grupo Ick (ya lo había realizado abundantemente en la campaña de febrero), pero en toda su propaganda omitió la denuncia al grupo Curi (que en esta oportunidad apareció como cabeza de uno de los mayores atropellos contra los pobladores de El Ceibal). Esto también explica que El Liberal (cuyo dueño es precisamente el grupo Curi) haya sido muy generoso en publicitar las acciones del MST.

El MST despreció un frente con el PO en febrero y luego en esta elección, prefiriendo coquetear con la Multisectorial y luego promover figurones locales. El MST debería reflexionar que siendo el PO una fuerza más reciente en la provincia y con un desarrollo organizativo menos extendido, obtuvimos una votación superior al MST en 13 departamentos, en el resultado general el MST obtuvo 2 bancas y el PO 1, y que los márgenes entre febrero y julio se estrecharon, ya que en aquella oportunidad el MST nos casi había triplicado y ahora no alcanzaron a duplicarnos.

Ahora se presenta el escenario de la propia convención.