Políticas

6/12/2022

Se actualiza el piso de Ganancias, 20 puntos detrás de la inflación

A partir de enero 2023 el impuesto alcanzará a nuevas capas de asalariados.

Imagen: Afip.

A partir del 1° de enero de 2023 el piso salarial del Impuesto a las Ganancias sobre la cuarta categoría (los salarios) se elevará a $404.062 bruto ($335.372 neto). Se trata de una suba por debajo de la inflación anual, con lo que nuevas capas de trabajadores pasarán a pagar el tributo.

El 2022 comenzó con un piso de Ganancias de $225.937 y la variación hasta enero del año entrante se ubicará en el 78,8%, quedando por debajo de la inflación anual proyectada del 100%. Sucede que el mismo se actualiza al compás de la evolución del salario promedio del sector privado registrado (Ripte) y está completamente divorciado del índice de precios, lo cual acentúa el carácter confiscatorio de dicho gravamen sobre el salario. Entonces, toda vez que un colectivo obrero logre a través de la lucha superar ese ingreso promedio (que pierde contra la inflación) y conquistar un aumento del salario real, el Estado le quitará parte de esa conquista cobrándole Ganancias.

Como ya dijimos en incontables ocasiones, el salario no es ganancia y por lo tanto no debería tener que abonar ese impuesto. La única ganancia es la que obtienen los capitalistas apropiándose de la mayor parte de la riqueza creada por los trabajadores durante su jornada laboral. Como vemos, a la explotación de la fuerza de trabajo ejecutada por las patronales se le suma la que ejerce el Estado a través de distintas vías, por ejemplo, mediante la aplicación de este tipo de tributos regresivos.

Si a eso le agregamos que un trabajador registrado destina el 17% de su sueldo a realizar aportes a la Seguridad Social, y, además, recaen sobre su bolsillo impuestos al consumo como el IVA, podemos afirmar que al fisco lo financia mayormente el pueblo trabajador. Mientras que los empresarios llevan adelante múltiples maniobras de evasión y son los únicos que reciben exenciones fiscales por parte del gobierno.

Por otro lado, a partir de enero 2023, quienes sean Autónomos y facturen un promedio mensual de $169.381 se verán alcanzados por el Impuesto a las Ganancias. Consiste en una cifra apenas por encima de la canasta de pobreza de octubre (ubicada en los $139 mil), y, a su vez, hay que tener en cuenta que dentro de esa categoría muchos son comerciantes que destinan buena parte de su facturación a la recompra de mercadería. En el caso de los que figuran en el sistema como “nuevos profesionales” o “nuevos emprendedores” la situación no es mucho mejor: la deducción de Ganancias llega apenas a una facturación promedio mensual de $188.201. Es decir, aquellos que logran asomarse por encima de la línea de pobreza son rápidamente atrapados por la Afip.

Es necesario, por lo tanto, eliminar de inmediato el gravamen de Ganancias sobre la cuarta categoría y que solo paguen ese impuesto los puestos gerenciales, los altos funcionarios y los capitalistas.