Siderca, pasó de todo

La conducción de la UOM, seccional Campana, convocó a una nueva marcha en reclamo del aumento y de lo que nos deben. La marcha que iba a concluir en un corte de ruta, terminó siendo un ejercicio aeróbico por Campana. Partimos de Siderca y tomamos para el centro de la ciudad, pasando por la municipalidad, donde encontramos a la intendenta, Stella María Giroldi, en la vereda, aprovechando la ocasión para saludar ante las cámaras de TV a los bravos gladiadores de la directiva de la UOM que encabezaban la marcha, y terminando el paseo en la sede del sindicato.

Se pudrió todo

Los compañeros que asistieron esperaban un discurso más combativo de parte de Abel Furlan, pero el burócrata repitió lo mismo que otras veces, que “con la UOM no se jode, que vamos a continuar con las marchas, que Rocca se niega a pagar el aumento y…”. Nada en concreto, nada que movilice a una lucha.

Mientras se desarrollaba este ‘acalorado’ discurso, un grupo de compañeros que intenta romper con lo tradicional, comenzó a pedir “que se realice el corte de ruta, que antepongan nuestros reclamos a sus intereses políticos personales, que se respete el estatuto de la UOM”. Esto molestó a algunos directivos y otros alcahuetes, que quisieron hacer callar los reclamos a las piñas. Sin embargo, tuvieron que comerse el garrón porque la reacción obrera no se hizo esperar y después de algunos cachetazos, los “bravos” directivos se atrincheraron en el sindicato mientras los compañeros presentes descargaban su bronca con toda clase de puteadas.
Dentro de Siderca las aguas están embravecidas, hay un par de agrupaciones que aún no salieron totalmente a la luz que están bombardeando con un cambio.

Ofensiva patronal

Mientras escribo esta nota nos enteramos que Siderca suspendió por cinco días a un compañero por usar el ‘mail’ interno de la fábrica para enviar el estatuto de UOM, subrayando lo que hay que hacer reglamentariamente para pedir una asamblea general y los requisitos para ser delegado. También acusaron de abandono de puesto de trabajo a un delegado, siendo que había salido a comprar algo para comer.

Lo peor, un congreso de delegados realizado el viernes 26 resolvió suspender del gremio por 45 días a cinco delegados, entre ellos los antes nombrados, acusándolos de haber instigado los “hechos violentos” que se desarrollaron en la puerta del gremio. El sindicato entrega de esta manera a estos compañeros para que Siderca haga lo que quiera con ellos, y los use de ejemplo contra los que piensan y actúan distinto a la burocracia.

El asunto es saber si los delegados que votaron esto llevaron el mandato de las bases. Esto no terminó, recién empieza.

Corresponal (27/6)