Políticas

11/11/2021

Solano vs. Maslatón: las perlitas del debate

Encontrá la transmisión completa en el canal de Youtube de Prensa Obrera.

Foto: Andrés Ojo @ojoobrerofotografía

El dinámico debate entre Gabriel Solano, dirigente del Partido Obrero y candidato a legislador por la Ciudad de Buenos Aires en el Frente de Izquierda-Unidad, y Carlos Maslatón, referente del “liberalismo” argentino y asesor de Javier Milei, que tuvo lugar el pasado martes 9 de noviembre, dejó importantes conclusiones acerca del discurso de quienes se presentan como la novedad pero que en realidad ofrecen viejas recetas ya utilizadas por políticos argentinos y traen a colación discursos fascistoides. El encuentro, que fue organizado por los periodistas de El Program, un segmento de El Destape, que oficiaron de entrevistadores neutrales, despertó un enorme interés y solo pudo ser presenciado por los 200 asistentes que era la capacidad permitida en el lugar, menos de la mitad de quienes armaron una larga fila para ingresar al lugar.

Uno de los primeros ejes temáticos fue acerca de los resultados que arrojaron las Paso, el derrumbe electoral del Frente de Todos con respecto a los últimos comicios, la consolidación de la izquierda como tercera fuerza nacional y el crecimiento del espacio que lidera Javier Milei. Sobre este punto, los candidatos discutieron la crisis económica del país y el endeudamiento como una de las razones centrales de la fuga de votos del kirchnerismo. El referente liberal planteó que “le atribuye el 80% del desastre actual al macrismo” y que “en diciembre de 2015 la Argentina no estaba destruida, estaba bajo los efectos de un gobierno totalmente equivocado en la política económica, pero no teníamos un endeudamiento o una situación de desequilibrio de precios que no tuviese solución”, a lo que Solano respondió “difiero en la idea de que en 2015 el país estaba desendeudado. Eso lo decía Cristina, lo decía Máximo y lo dijo Dujovne para justificar el endeudamiento que venía”. Y continuó: “cuando veíamos exactamente la deuda, no había desendeudamiento, solo que no contaban como deuda un tema que para nosotros siempre fue importante: la llamada deuda ‘interestatal’. Ahí había una picardía, ¿cuál era? A la Anses le metemos todos los bonos y no pasa nada porque es “interestatal”. ¿Cómo que no pasa nada? Los jubilados se cagan de hambre. Ganan 25 mil lucas mientras se roban la plata de la Anses. El saqueo de la Anses no es gratis; no es gratis que el 85% de los jubilados en Argentina gane menos de 35 mil pesos y sean pobres”.

“Hay una feliz coincidencia entre macristas y kirchneristas, por eso ahora vamos a tomar deuda. Después la coincidencia fue al revés: el macrismo dijo no emitimos más y vino Alberto Fernández y empezaron a emitir. Pasamos del desendeudamiento al endeudamiento; de la falta de emisión a la emisión. Se van complementando los gobiernos pero la política de saqueo continúa”, gatilló Solano.

En el mismo bloque debatieron acerca de la actual deuda con el FMI y la fuga de capitales, Solano dijo que “ayer sacó Página 12 una tapa que decía Macri reconoció que los 44 mil millones de dólares que le dio el FMI los usó para financiar la fuga de capitales de los bancos comerciales. ¡Ya lo sabíamos! Vas a las cuentas nacionales y te das cuenta. Ahora bien, ¿Qué hacemos con esta información? Decidimos: pagamos o no pagamos la deuda del Fondo Monetario. Nosotros votamos que no; nosotros como Frente de Izquierda decimos lo siguiente: vamos al Congreso y votamos en contra de pagarle al Fondo Monetario Internacional, ni un dólar. Pregunto, ¿opina lo mismo Milei? Yo lo escuché y dijo que no, que hay que pagar. Está en contra de haberla tomado, pero una vez que se tomó hay que pagarla”.

“Es una disidencia importantísima”, continuó. “Argentina no tiene futuro pagando estos 44 mil millones de dólares. Por qué el pueblo argentino, que está cagado de hambre, tiene que bancar los negocios de la clase capitalista?”. Frente a esto y ante la pregunta del periodista a cargo de la mediación del debate sobre si se imaginaba al bloque de La Libertad Avanza votando en contra del acuerdo con el Fondo que enviará Martín Guzmán al Congreso, Maslatón, dudoso, contestó que “si de él dependiera sí”, aunque luego volvió sobre sus pasos. “Hay que ver, tengo que hablar con Milei”, concluyó, para luego defender el pago de la deuda al FMI en 2005 de Néstor Kirchner.

Otro de los segmentos más polémicos y donde se expresaron las diferencias sustanciales entre el socialismo y el liberalismo fue cuando se enfrentó a los candidatos a expresar sus referentes políticos de la actualidad. Maslatón confirmó las profundas raíces conservadoras y derechistas del espacio que representa, colocando como referencia a Donald Trump, 45° presidente de EE.UU.; Jair Bolsonaro, presidente de Brasil; Santiago Abascal, presidente del partido ultraderechista Vox de España; y Javier Milei en Argentina. Para Solano, en cambio, es el pueblo chileno que se levantó contra la dictadura de Piñera y protagonizó la rebelión popular de 2018; el pueblo colombiano y el pueblo palestino. “Nosotros no defendemos ninguna gestión estatal. El mundo lo dirige el capitalismo, y así está el mundo. Nosotros no vamos a reivindicar nada de eso, mi apoyo es a los pueblos del mundo que se rebelan contra la injusticia y contra la explotación; eso es lo que permite avizorar una transformación social, apostamos a eso.”

Más tarde se detuvieron a debatir sobre el cambio climático, el cual Maslatón niega que exista al igual que La Libertad Avanza. Solano fue categórico: “Nosotros no tenemos ningún acuerdo con el resto de los candidatos sobre el cambio climático. Alberto Fernández y el peronismo son responsables de los desmontes en el noreste argentino, del saqueo de la cordillera de los Andes por los grupos mineros. Ellos son hipócritas, pero ya decir que el cambio climático es un invento del comunismo es un dislate porque la información que se quiere utilizar para negar la destrucción ambiental que está generando el capitalismo no es rigurosamente seria. No se pueden comparar momentos de la historia del planeta tierra como si fuesen comparaciones válidas. Acá estamos hablando, y esa es la novedad, de la situación ambiental que estamos viendo ahora, es que es la acción del hombre y no la acción de la naturaleza la que está generando un calentamiento global. Esa es la diferencia con respecto al pasado, porque es verdad que la tierra estuvo más caliente y más fría, pero eran procesos naturales, no procesos sociales.”

Además, acotó que está “en contra de los que dicen que Argentina es un país pobre, entonces encarguémonos de los pobres y no del calentamiento global, porque ¿saben quiénes sufren los impactos ambientales? Los pobres, no los ricos. ¿Quiénes sufren los desmontes, quiénes sufren las enfermedades por fumigaciones de aviones para la soja?”. Fue este debate el que devino luego en la reforma laboral, uno de los temas más discutidos por los bloques políticos de Argentina, dentro de los cuales la mayoría está a favor excepto el Frente de Izquierda. Ante la afirmación de Maslatón de que la plusvalía ya no existe, Solano retrucó: “Resulta que no existe plusvalía, pero todos quieren reforma laboral, explíquenme por qué todos quieren reforma laboral. Ese es el punto crucial acá. ¿Qué pide el FMI? ¿Qué está aprobando el congreso de Brasil? ¿Por qué Bolsonaro quiere la reforma laboral? Todos quieren ir contra los trabajadores. El problema crucial del capitalismo es cómo avanza contra las conquistas de la clase obrera que fueron conseguidas con décadas de lucha y sangre de los trabajadores”.

Por otro lado, ambos discutieron sobre la última dictadura militar. Es conocido que Javier Milei y el resto de sus candidatos son defensores de la teoría de los dos demonios y que su lista está integrada por defensores de los genocidas, como Victoria Villarruel. “Mi visión de los ’70 no es la visión que presenta Carlos”, comienza Gabriel. “Empieza especialmente en el año 69, con el Cordobazo, el Rosariazo, el Tucumanazo. (…) El Cordobazo no fue por la vuelta de Perón; el Cordobazo cantaba un gobierno obrero y popular. La clase capitalista, que le había hecho un golpe a Perón en el ’55 y lo tuvo proscripto durante 18 años, empieza el operativo de vuelta. ¿Por qué? Por el Cordobazo, fueron a buscar a Perón para que pare el Cordobazo. Perón tiene que cambiar de política porque los obreros estaban enojados con él. (…) Cuando vuelve Perón, en el año ’73, la primera medida del golpe contra Cámpora -está documentado- fue Ezeiza, una verdadera masacre que nunca se investigó. El objetivo de Perón es parar el Cordobazo y por eso arman la triple A.”

“El problema del golpe era ir contra la clase obrera. Cuando se hacen las estadísticas de los desaparecidos surge que el 70% eran obreros. La idea de que había una especie de guerra entre dos bandos militares enfrentados no tiene asidero histórico, no hay evidencia empírica. La teoría de los dos demonios busca justificar el único demonio que existió. Por eso la primera medida fue intervenir los sindicatos, eliminar los estatutos especiales, terminar con todo vestigio de legislación laboral, terminar con el régimen de indemnizaciones. Y la clase obrera luchó.”

Durante toda la campaña, Gabriel Solano y los candidatos del Frente de Izquierda se dedicaron a desnudar las “falacias” de Milei y su intento de mostrarse como “anticasta” y “antisistema”, lo cual le dio al debate un mayor interés, demostrado en el hecho de que en menos de 36 horas el video completo llevaba más de 30 mil reproducciones a través del sitio de Prensa Obrera y el de los organizadores.