En septiembre del año 1999 son promulgadas por la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires las Leyes 12322, que declara al Partido de Patagones Área Patagónica Bonaerense y 12323 que crea La Zona Austral de la Provincia de Buenos Aires.

 

Ambas leyes determinan idénticos “beneficios promocionales para las actividades productivas del sector agropecuario, el comercio y la industria” prorrogables por períodos de cinco años, pero se reserva para el Área Patagónica Bonaerense la posibilidad del futuro “reconocimiento del Partido de Patagones como integrante de la Patagonia Argentina en los términos de la Ley Nacional 23272”.

 

Los beneficios se orientan a subsidiar y bonificar proyectos productivos y actividades económicas con exención de impuestos y reducción de tasas de intereses en las líneas crediticias de los Bancos Nación y Provincia de Buenos Aires, sin mención de promoción alguna para la amplia mayoría de trabajadores asalariados o jubilados.

 

En estas últimas semanas, en el sudoeste bonaerense, una disputa por el protagonismo político amenaza con producir una fisura en el frente que conforman de hecho en la Legislatura provincial el Frente Renovador y Cambiemos. El proyecto de inclusión de Villarino al Área Patagónica Bonaerense presentado por la diputada massista María Marta Corrado y aprobado por la Cámara de Diputados, modificando la Ley 12.322, desató un fuerte rechazo por parte de los Intendentes de Puan y de Tornquist, así como del Senador Horacio López, todos de Cambiemos.

 

La iniciativa altera los términos de la Ley 12.323 de Zona Austral Desfavorable impulsada entre otros por el actual senador por la sexta sección Horacio López, la cual incluía en sus “beneficios” al distrito de Tornquist y a cuarteles de los distritos de Puan y Saavedra junto al de Villarino.

 

El Intendente de Tornquist señaló: “es una lástima que Corrado sólo se haya preocupado por Villarino por estar gobernado por el Frente Renovador y haya dejado de lado al resto”.

 

Se trata, sin dudas, de una disputa de aparatos políticos a espaldas de los intereses de las mayorías en una región en la que los conflictos laborales, inundaciones, ausencia de obras de infraestructura, sumados a las consecuencias del tarifazo y el ajuste en curso, reclaman una agenda que estos no están dispuestos a llevar adelante. Como señaláramos oportunamente en referencia a la aprobación de la Zona Austral Desfavorable “la ley tendrá efectos mínimos o nulos para los sectores populares compuestos mayoritariamente por asalariados. Mantendrán el nivel de sus ingresos y seguirán pagando los mismos precios”

 

Los trabajadores del sudoeste bonaerense no recibirán beneficio alguno, así como no los reciben los trabajadores patagónicos, especialmente los de Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego quienes deben soportar el brutal ajuste por parte de sus gobiernos provinciales.

 

Por la abolición del impuesto directo al salario y a las jubilaciones.

 

Eliminación del IVA.

 

Ningún impuesto a la vivienda única del Trabajador.

 

Por un salario mínimo igual al costo de la canasta familiar.

 

Por el 82% móvil en las jubilaciones.