Después “de dos años de debatir el conflictivo tema de la reestructuración de las tarifas telefónicas”, tras la cuarta audiencia convocada por el gobierno con ese fin, “no se destrabó la discusión” (Ambito, 6/12).

Telefónica y Telecom, con el apoyo del gobierno nacional, vienen reclamando una reestructuración tarifaria, cuyo objetivo declarado es reducir el costo de las llamadas interurbanas compensándolas con un incremento de las urbanas, y especialmente de las residenciales (el abono en el conurbano pasaría de 19 a 38 pesos —según algunas versiones hasta podría triplicarse—, y se perderían los 100 pulsos libres que hay actualmente). El efecto sería ‘neutro’, coinciden cínicamente los dos grandes pulpos, y por esta vía ‘bajaría el costo argentino’, es decir, las tarifas internacionales. El paquete provocaría un incremento extraordinario de los superbeneficios de los pulpos (Página 12, 8/12).

Es esta estafa lo que explica la enorme disputa que suscita el ‘rebalanceo de tarifas’, lo cual se expresa en el hecho de que en la audiencia “no hubo representantes del gobierno (de la provincia de Buenos Aires) ni de las entidades empresarias”, y que Telecom y Telefónica hayan chocado violentamente con los intereses de las empresas de telefonía móvil, que reclaman que los reajustes “guarden relación con los costos” (Ambito, 6/12). Temiendo alguna reacción de los usuarios que serían más afectados, la reunión fue organizada deliberadamente bien lejos de Buenos Aires.

Lo interesante es que la principal reacción contra el reajuste tarifario, provino del interior: los trabajadores de Telecom de Salta reaccionaron violentamente contra el despido de 27 compañeros. Ocurre que el gremio salteño, al igual que el de Buenos Aires, Rosario y Córdoba, han repudiado masivamente el ‘preacuerdo’ de nuevo convenio laboral que las patronales acaban de firmar con la burocracia menemista del gremio. El ‘preacuerdo’ viene de la mano del ‘reajuste tarifario’. La reacción conjunta de los telefónicos contra el ‘preacuerdo’ es una enseñanza de cómo tendremos que emprenderla todos los usuarios, del interior y porteños, contra el saqueo de Telefónica y Telecom.