Estuvo presente esta mañana en el piquete en Puente Avellaneda, uno de los cortes en los accesos a la Capital desarrollados por el sindicalismo combativo y la izquierda. El dirigente del PO, Néstor Pitrola, evalúa que el paro nacional “ha sido tal vez el más importante del gobierno Macri, pero han primado los mecanismos de contención de la burocracia”. Y dice, dentro de una entrevista en la que se refiere también a la salida de Luis Caputo del Banco Central, que “nos debemos un trabajo muy profundo en las bases del movimiento obrero” para superar a esas conducciones burocráticas.

¿Cuál es tu primera evaluación del paro?

El paro ha sido tal vez el más importante del gobierno Macri por su contundencia pero no ha roto los marcos de la contención del paro desmovilizado marcado por el triunvirato cegetista. La movilización del lunes fue una ficción de paro activo nacional: no hubo paro de 36 horas, ni de  Camioneros, ni de Bancarios, ni de Gráficos, ni de Atilra, ni de ninguno de los gremios de la Corriente Federal. Tampoco en el Estado y fue débil en docentes y con escasísima movilización. La plaza fue protagonizada sobre todo por las organizaciones sociales. De manera que han primado los mecanismos de contención de todos los sectores de la burocracia que articulan con las diferentes alas del PJ en la perspectiva de “hay 2019”, que Macri siga su gobierno, su ajuste. Van a dejar pasar el presupuesto por el Congreso con mayor o menor acuerdo y esta es la perspectiva que enfrenta el sindicalismo clasista, la izquierda.

¿Cuál es el planteo del sindicalismo combativo?

Naturalmente, después de estas jornadas nos debemos un trabajo muy profundo en las bases del movimiento obrero porque hay que madurar una conciencia para desafiar estos mecanismos de contención que nos llevan por un camino de derrota y aislamiento de grandes luchas que están ocurriendo en el período, sea docentes universitarios, el Astillero o la propia docencia de la provincia de Buenos Aires.

Tenemos que trabajar por un verdadero paro activo y plan de lucha y eso requerirá un duro trabajo en las bases del movimiento obrero. El plenario sindical combativo ha abierto una ruta, recientemente ha hecho un gran plenario en Córdoba, antes en Santa Cruz, siguiendo lo realizado en Lanús el 23 de junio. Y luego vamos a trabajar con una perspectiva política, marcando una salida ante el agravamiento de la crisis y los diferentes capítulos que se van escribiendo.

¿Cómo se vincula la renuncia de Caputo con las noticias que llegan del Fondo?

La eyección de Caputo del Banco Central es un hecho que marca el desconcierto, las fracturas internas y una probable negociación en Nueva York directamente con los fondos de inversión en función de algún tipo de alteración que condicione los desembolsos del Banco Central. Argentina está técnicamente quebrada, se ve en el hecho de que han inscripto la reestructuración de deuda en el presupuesto. Vamos a atravesar distintos capítulos y vamos a trabajar fuertemente en la conciencia de los trabajadores para abordar una salida.

Desde ese lugar es que planteamos el problema de que ante el agotamiento de un gobierno y de un régimen que es también el de toda la oposición que le ha convalidado las leyes, que ha acompañado el ajuste a través de los gobernadores, que le vota el presupuesto de ajuste, tengamos una salida mediante una Asamblea popular Constituyente, libre, soberana, con poder, basada en el voto popular, para desenvolver allí un programa de los trabajadores. Esta es la perspectiva central que el sindicalismo combativo ha planteado en la columna independiente y en el acto que realizamos el 24 en el Obelisco con todo el sindicalismo combativo.