Políticas

22/7/2019

Termina la “reparación histórica”, una estafa a los jubilados que el gobierno no logró concretar

En 3 años solo logró desactivar el 15% de los juicios

Este lunes vence el plazo para que los jubilados opten por la llamada Reparación Histórica, que supone una quita importante en los montos que el Anses debiera pagarles por los haberes mal calculados desde la fecha del retiro.


La mecánica, que es una verdadera estafa para los jubilados y pensionados, fue propuesta por el macrismo en el 2016 y aprobada entonces por el Congreso con el apoyo de una parte de la bancada del PJ. Estaba acompañada por la presión evidente que supone la extensión por años de los juicios por actualización llevados adelante por personas mayores que requieren de ese dinero para su mantenimiento.


Con alta cuota de perversidad, el gobierno planteó la alternativa amenazante de que con la oferta oficial se iba a cobrar mucho menos pero que la negativa suponía esperar el largo plazo que alcanza hasta que se termine el juicio, explotando la presión que supone la expectativa de vida de los jubilados litigantes.


La amenaza latente


Con su implementación se trató de poner fin a los centenares de miles de juicios por actualización de haberes  colocados como una amenaza latente para los sucesivos gobiernos, que no explotaba por la decisión política de la Corte de mantener congelado desde hace 11 años, el pedido de generalización a todos los jubilados de dos fallos que emitiera el tribunal y que establecían un cambio en la mecánica de ajustes, favorable para los beneficiarios, y que los obligaba a llegar a esa instancia de manera individual.


La Corte, que con un fallo reciente busca zanjar parte de la controversia judicial respecto del índice de actualización a aplicar, también tiene pendiente de tratamiento el reclamo por la modificación de la movilidad de los haberes que realizara el Congreso en medio de las enormes movilizaciones de diciembre de 2017 -nuevamente con el voto del oficialismo y parte del PJ- porque fue aplicada en forma retroactiva y eso es inconstitucional. De esa manera, le sustrajeron un 10% de incremento a los haberes jubilatorios.


Una estafa que no resultó


La diferencia entre lo ofrecido por el Anses con la Reparación y lo que corresponde cobrar es tan grande que, según los datos oficiales dados a conocer esta semana, solo unos 46 mil jubilados de los más de 300 mil que estaban realizando juicio cuando se puso en marcha la propuesta aceptaron acogerse a la Reparación. Es que, incluso para los que ya tenían sentencia firme en sus juicios, la oferta era sustancialmente menor porque a la deuda que surge del dictamen le aplican un índice de actualización mucho menor al establecido judicialmente  -rechazado incluso por la propia Corte- y a los que no la tenían la oferta les reconoce un retroactivo de solo 48 meses, más allá de cuanto tiempo llevara el reclamo.


Es decir que la maniobra destinada a cerrar los juicios en marcha no resultó como esperaban el oficialismo y la oposición y mantiene el tema abierto, cuando el reclamo del FMI y el conjunto de la burguesía es reducir drásticamente el monto destinado a beneficios previsionales.


Las cifras abultadas del Anses


El dato difundido por el Anses de que han aceptado la Reparación alrededor de un millón de jubilados tiene la trampa de que incluye a una masa que no había realizado juicio y a los cuales el gobierno comenzó a pagarles unilateralmente una actualización arbitraria, sin retroactivo alguno y que tenía como requisito que esos beneficiarios desistieran a futuro de realizar un juicio o reclamo.


En realidad, una buena parte de esos 700 mil beneficiarios son jubilados que cobran haberes bajos y el monto del reclamo era relativamente menor como para que incentivara  a realizar una presentación judicial.


En 2016, el Anses estimó que la Reparación alcanzaba a un universo de 2,3 millones de personas, de las cuales 250.000 tenían juicio en curso y 50.000 ya contaban con sentencia firme, a todos los cuales se les pagaba menos de lo que les correspondía. Si estos datos oficiales son ciertos, la mitad de esos jubilados a los que les están pagando menos de lo que les corresponde, no recibieron ningún aumento por la mecánica de la Reparación.


Un programa de toda la burguesía y el FMI


Que la iniciativa haya sido acompañada por la parte del PJ necesaria para su aprobación en las cámaras, se explica porque el kirchenismo, en sus doce años de gobierno, mantuvo los haberes jubilatorios en niveles de miseria que hacen que hoy la jubilación mínima que cobra el 60% de los beneficiarios ronde los $11.000 mensuales y que la inmensa mayoría de los haberes esté bien lejos de cubrir el costo de la canasta de los jubilados.


En el programa de la burguesía y del imperialismo está aumentar la edad jubilatoria, reducir el haber inicial y modificar nuevamente el índice de actualización de los haberes, de tal manera que se aleje cada vez más de la inflación.


Detrás de este programa se encolumnan todos los bloques políticos patronales –oficialistas y opositores- que proponen seguir las recetas del FMI.


El programa obrero


El programa obrero es exactamente el opuesto. En defensa de los jubilados actuales y futuros: 82% móvil y jubilación mínima equivalente al costo de la canasta del jubilado, que hoy supera los $30 mil. No al aumento de la edad jubilatoria. Retrotraer la reducción a los aportes que realizan los patrones. Impuestos al gran capital para cubrir cualquier déficit del sistema previsional.