Una multitudinaria Marcha de Antorchas coronó el lunes 14 en Ushuaia una nueva jornada de lucha contra el ajuste de la gobernadora Rossana Bertone (FPV), que plantea –entre otros puntos- un aumento de la edad jubilatoria, un recorte de los salarios estatales y cientos de despidos.

Desde temprano, los empleados estatales –que llevan 12 días de paro- desarrollaron múltiples piquetes en la capital fueguina. También se movilizaron al Superior Tribunal de Justicia junto a pensionados que rechazan descuentos en las RUPE (pensiones a las personas con discapacidad) y a la Legislatura provincial.

Una imponente asamblea votó, antes de la Marcha de Antorchas, una campaña de firmas para la revocatoria de la gobernadora y una nueva jornada de bloqueos a los accesos de la ciudad.

El levantamiento de la reunión de labor parlamentaria, pautada para el jueves 17, encrespó aún más los ánimos.

La jornada de piquetes votada en la asamblea se cumplía con gran éxito el martes 15. Se encontraban bloqueados los accesos a Ushuaia (Ruta 3, Aeropuerto).

La gobernadora ha echado a correr el rumor de un acuerdo, desmentido por los sindicatos en lucha. En la medida en que no haya respuestas positivas, está planteada una nueva movilización que -según todos los pronósticos- podría superar las anteriores.