Políticas

28/10/1987|204

Tomemos el paro activo en nuestras manos

El paro activo nacional del próximo miércoles 4 de noviembre no fue una decisión que el Comité Central Confederal haya tomado de buen grado o animado de una auténtica voluntad de lucha.

Para “gracias, Sourrouille” (como se lo conoce a Lorenzo Miguel), o para el presuroso huésped de Olivos, que le dio el visto bueno a Alfonsín hace sólo dos semanas —nos referimos a Ubaldini—, un paro nacional contra el paquetazo había dejado de figurar en los planes. Puntales de Cafiero, recordaban muy bien que éste había calificado a las huelgas, poco antes de las elecciones, como un arma que favorecía a los enemigos.

Pero en Córdoba y en Tucumán; en docentes, comercio, sanidad, ferroviarios o gráficos; se decidió de otra manera. En los supermercados y puestos de venta de comestibles, el pueblo quiere que sea de otra manera. La reacción popular va cobrando forma, por la simple razón de que el “rodrigazo” de Alfonsín no sólo perjudica a la nación y favorece al imperialismo; no sólo golpea con brutalidad a los trabajadores y beneficia al capital; sino por sobre todas las cosas porque no lleva a ningún lado, sino a un nuevo “ajuste”, a un nuevo “sacrificio” y a un nuevo “rodrigazo” para dentro de muy poco tiempo.

A todo lo largo y ancho del país los trabajadores obligan a sus dirigentes burocráticos a convertirse en pilotos de tormentas. En todos los sindicatos se está viviendo el fenómeno de las bases imponiendo a los burócratas medidas de lucha, que éstos asumen inconsecuentemente y con la vista puesta en desgastar la voluntad combativa de las masas.

El paro nacional activo ha sido arrancado por la base a la burocracia, y lo que para ésta es una maniobra, para los trabajadores es un paso hacia la generalización de la acción.

Preparemos a fondo este paro, votando en asambleas el pliego de reivindicaciones que la CGT no formula y organizando con todo el pueblo explotado los piquetes y las manifestaciones callejeras.

Llamamos a los activistas y a los militantes a un frente de acción por la victoria del paro nacional y la continuidad de la lucha.

Llamamos a la izquierda a concretar en el combate la vocación unitaria que pregona.

* Por la anulación de los aumentos de precios y tarifas.

* Por un salario y jubilación mínimos e indexados de ₳ 1.000

* Por el no pago de la deuda externa.

* Por la expropiación de la banca, la apertura de los libros de las empresas y el control obrero de la producción.