Políticas

21/6/2007|997

Un escenario preelectoral de tarifazos, negociados y represión

Comité Tucumán

Alperovich ha reclamado a la Legislatura el pronto tratamiento de un nuevo convenio con las empresas concesionarias de EDET, que contempla una serie de aumentos tarifarios que elevarían el costo de la luz, hasta fin de año, en un 30%.


Alperovich señaló que la multinacional chilena que tiene el control mayoritario de Edet había realizado una demanda por 125 millones de dólares ante el CIADI, demanda que retiraría si se aprueba el nuevo convenio.


Alperovich se ha sometido a la extorsión del pulpo chileno y, en la medida en que dominan la Legislatura, alperovichistas y jurista van a dar el visto bueno al nuevo convenio y al tarifazo.


Negociados y tarifazos



El aumento de la luz no sería el único.


En la última semana se paralizaron la construcción de 67 edificios en el centro de San Miguel como resultado de no contar con sistema de cloacas y provisión de agua asegurada. Las constructoras amenazaron con suspensiones y despidos masivos. La crisis se resolvió mediante un plan de emergencia de perforación de nuevos pozos y el anuncio de que nuevas construcciones requerían de inversiones de la SAT (la empresa proveedora de agua) y que ello sólo sería posible con un aumento tarifario.


Alperovich está directamente vinculado al negocio de la construcción y la SAT funciona como una caja negra, bajo control directo de la camarilla gubernamental.


Alperovich usa cada vez mas el poder del Estado para favorecer sus negocios y los de sus grupos amigos.


Negociados y represión



La Universidad Nacional de Tucumán es un polvorín. Salarios de hambre, aulas abarrotadas, falta de elementos indispensables. En distintas facultades se están imponiendo medidas limitacionistas y represivas.


Frente a la situación se vienen sucediendo distintos conflictos, a cuya cabeza están los estudiantes de Artes, pero ahora se han sumado los de Derecho, que esta semana realizaron una asamblea general y cortaron la calle frente la facultad.


La camarilla del rector Cerisola, proveniente del radicalismo, es una agencia de Alperovich en la universidad, asociados a los negocios ligados a la explotación de los yacimientos mineros de La Alumbrera y otros en Catamarca.


Cerisola está impulsando un proyecto de “reglamento de convivencia” que es una copia fiel del reglamento disciplinario impuesto por la dictadura en junio de 1976. Plantea sanciones de uno a tres años para aquellos estudiantes que “interrumpieran el normal funcionamiento democrático de los órganos de gobierno de las distintas facultades y de la universidad”.


Por una alternativa de los trabajadores



Alperovich, a diferencia de lo que hace Kirchner, no está esperando a conseguir la reelección para poner en práctica su política de mayores tarifas. Tiene una confianza enorme en que esto no trabará su objetivo electoral, tan grande es la hegemonía que ha impuesto en el campo de los partidos patronales. Cree incluso que de este modo da una prueba de autoridad que incrementará los votos esperados. Nosotros, en oposición a esta confianza, desplegaremos una intensa campaña de denuncia del tarifazo y un llamado a los trabajadores a votar por el Partido Obrero sobre la base de un programa de defensa de los mínimos niveles de vida de las masas. En oposición a los aumentos de tarifas reclamamos la apertura de los libros de las empresas autorizadas a aumentar sus precios, el control obrero de la producción y una reorganización de la producción industrial sobre nuevas bases. Nos proponemos construir una oposición política a Alperovich sobre la base de un programa de defensa de los trabajadores y de recuperación de sus conquistas históricas.


En varios escenarios han surgido movimientos de lucha autoconvocados. Tabacaleros autoconvocados, jubilados autoconvocados, carreros autoconvocados. Son movimientos incipientes que se debe coordinar y desarrollar al margen de las burocracias que están maniobrando para ponerlos bajo su control. La burocracia se limita a hacer acto de presencia ante los escenarios de lucha de los movimientos combativos. Estas luchas ponen de manifiesto la tendencia del pueblo y las perspectivas de una estrategia política que subraye el antagonismo entre los reclamos de las masas, por un lado, y la defensa estatal de los privilegios capitalistas, por el otro.