Políticas

30/1/2020

Un nuevo femicidio en el norte neuquino: otra vez había denuncias previas

Plenario de Trabajadoras Chos Malal

En la madrugada del 27 de enero, a 30 kilometros de Chos Malal, en las cercanías del Puente del Arroyo "Aquihueco" se encontró el cuerpo sin vida de una mujer, el cual había sido escondido tapándolo con unas ramas. Se trata de Celeste Saavedra, de 29 años de edad, trabajadora, deportista y madre de un pequeño de 7 años. Era oriunda de San Martin de los Andes y residente en Tricao Malal.


La autopsia determinó que murió por un traumatismo severo de cráneo. Indudablemente se trata de un nuevo femicidio, ya que Celeste había denunciado en diciembre del año pasado a su pareja, Oscar Fernando Retamal, por violencia de género y con respecto a quien había obtenido una restricción de acercamiento. Este luego se suicidó, apareciendo su cuerpo en cercanías de donde se halló a Celeste.


La Justicia pretende inculpar a la víctima señalando que ella “no había informado que había regresado a la ciudad donde residía su victimario, Oscar Retamal”. Es la respuesta de una institución misógina que sabe perfectamente que existe un alto número de mujeres víctimas de violencia de género, que vuelven a la relación tras la separación, debido a la situación de vulnerabilidad económica y social a la que son sometidas en el marco del actual régimen social, un régimen que coloca a las mujeres en una situación de dependencia y de sometimiento. Por esta razón, es sumamente necesario la atención psicológica y el acompañamiento a las víctimas por parte de equipos especializados.


El crimen de Celeste sigue poniendo en evidencia la falta de políticas y presupuesto estatal para implementar los recursos necesarios en la atención de situaciones de violencia de género y familiar. Las cifras de femicidios en Argentina son impactantes: 327 mujeres fueron asesinadas en 2019, es decir, 1 cada 27 horas. Solo en el mes de diciembre, fueron 30 las mujeres víctimas de femicidios. En la enorme mayoría de los casos, se trata de parejas o ex parejas que ya han sido denunciadas. A menos de 2 años del caso del doble femicidio de Karina y Valentina, no se han implementado dispositivos de contención socioeconómicos, psicológicos ni legales.


Por eso el Estado es Responsable y cómplice de garantizar la impunidad, sin brindar soluciones eficaces a la violencia que sufrimos las mujeres desocupadas o quienes vivimos de un trabajo precario por debajo de la línea de pobreza. Sin herramientas suficientes, sin un presupuesto real que afronte y de respuesta inmediata,  este brutal  desenlace que no es el primero, tampoco será el último.


Para enfrentar esta situación de crisis es necesario contar con recursos estatales bajo control y ejecución de un Consejo Autónomo de las Mujeres, independientes del Estado, integrado por las organizaciones del movimiento de mujeres que luchan, cuyas integrantes puedan ser electas y sus mandatos revocables, que fiscalice e implemente políticas de asistencia inmediatas e integrales en favor de las mujeres.


Desde el Plenario de Trabajadoras, repudiamos este brutal hecho y exigimos la clarificación de las responsabilidades de los funcionarios del Estado. Por eso nos hemos convocado en el día de ayer, junto a mujeres y organizaciones sociales, en la Plaza Sarmiento para exigir justicia por Celeste, equipos interdisciplinarios para la atención y acompañamiento de las mujeres y niñes que denuncian violencia de género y familiar, casas refugio para las víctimas, asistencia económica igual a la canasta familiar para las víctimas de violencia. Ni una menos , el Estado es responsable.