El 9 de julio marchó la unidad piquetera del 26 de junio con las consignas Que se vayan todos, Fuera Duhalde asesino ya. La gruesa columna partió desde Belgrano y 9 de julio, sin el MTL y sin Barrios de Pie, pero al llegar a Avenida de Mayo se sumó una columna de esta última organización, quienes revisaron la posición inicial de concurrir exclusivamente como Patria Libre; en cambio, el MTL llegaría hasta Plaza de Mayo junto a la columna de IU.

La formación de una columna piquetera fue la conclusión de un debate político entre los convocantes en el que unánimemente se rescató la jornada del 26 y se responsabilizó al gobierno de una decisión política premeditada de producir la masacre represiva. Fue común la caracterización de la derrota política del gobierno, que se vio obligado a plantear el adelantamiento electoral como resultado de nuestra lucha y del derrumbe de la maniobra de culparnos de la violencia y de un complot subversivo.

Todos denunciaron los largos once meses que restan para una convocatoria electoral restringida, en los que se intentará llevar adelante la represión, la entrega y el hambre del pacto del régimen político con el FMI. De allí las consignas para que Duhalde, responsable de la represión, se vaya ya, y con él se vayan todos, como única vía para abrir paso a las reivindicaciones de los explotados.

La columna piquetera marcó políticamente con estas banderas buena parte de la convocatoria del 9 de julio. Por la impresionante sintonía política con las Asambleas Populares, por el desembarco masivo por tercera vez en dos semanas de un frente político piquetero (el 3 de julio se expresó en la columna sur) independiente del gobierno, contrario a la tregua y a la concertación, partidario de acabar con el gobierno ya. La columna piquetera de las víctimas del 26 recibió a su paso el aplauso incesante de la población.

Precisamente, éste fue el campo político de delimitación con la CTA, la FTV y la CCC, opuestos al planteo de que se vaya Duhalde, mucho menos que se vayan todos, y mucho menos con otro Argentinazo. Esta fue la lectura política del Bloque Piquetero Nacional en la reunión con los cuatro agrupamientos, sobre el contenido de la lucha política en la semana del 26 al 3 de julio, donde el “espacio” de un frente centroizquierdista de colaboración de clases (ARI, IU, Frente para el Cambio) trató de montarse sobre la sangre derramada de los agrupamientos que han desafiado la tregua.

Está ahora en juego la continuidad del plan de lucha en forma común, el cual tienen por ahora claramente establecido el Bloque Piquetero Nacional y el Mijd como resultado de las resoluciones de la Asamblea Nacional de Trabajadores. El cumplimiento de este plan de lucha incluye la acampada en todas las plazas del país, que ha sido planteada a todo el frente de organizaciones. Son parte también las acciones zonales comunes y la organización nacional de la red de empresas en lucha que tuvo en el masivo acto frente a Perfil ocupada, al terminar la marcha, un eslabón formidable de unidad obrera y piquetera.