Tras las elecciones nacionales del domingo 27 y a poco más de una semana de los comicios del centro de estudiantes de la Universidad de General Sarmiento, se anticipa una nueva etapa.

Por primera vez en su doble mandato como rectora, Gabriela Diker había salido decididamente a jugar a favor de un armado político nacional, desde su rol como anfitriona en el Encuentro educativo del Frente de Todos hasta su participación en numerosas actividades de candidatos. Por estos motivos, se rumorea la posibilidad de que sea colocada al frente del Ministerio de Educación Provincial, aunque también resuena el nombre de Jaime “Jimmy” Perczyk (actual presidente del Consejo Interuniversitario y rector de la universidad de Hurlingham).

Este cuadro explica que se haya concretado, después de idas y vueltas, el acuerdo electoral entre las agrupaciones El Puente, ligada al intendente reaccionario y antiderechos Leonardo Nardini, y el Funyp, alineado con la rectora: ambos intervinieron directamente para que ello suceda. Habiendo pasado de rectora progre “independiente” a armadora del peronismo al interior del gobierno de Alberto Fernández, Diker, que el año pasado había jugado abiertamente contra los “fachos” de El Puente, los coloca ahora bajo su ala en desmedro del deshilachado Funyp.

El objetivo del acuerdo es desalojar del centro a la actual conducción del Frente de Estudiantes de Izquierda (FEI!), dando punto final a la independencia política de un centro que ha estado a la cabeza de la lucha y organización de les estudiantes, denunciando tanto el ajuste de Macri como su ejecución en la universidad de la mano de la gestión (que aprobó presupuestos a la baja durante los 4 años “neoliberales”).

Se trata de un asunto clave para el estudiantado de la Ungs. La integración de Diker al gobierno nacional entrante y al nardinismo coloca a nuestra universidad en la primera fila para la aplicación de reformas antieducativas (vaciamiento de las carreras, posgrados arancelados, privatización), que vienen de la mano de los compromisos de los Fernández con el FMI. Ya este  año aprobaron en más de una oportunidad en el Consejo Superior pasantías basura, al igual que lo hacen los rectores macristas y radicales, presentando como a estos trabajos precarizados como “oportunidades de inserción”.

El único obstáculo que hoy encuentra el ajuste del rectorado y el PJ es el Ceungs independiente y de izquierda. El FEI! y El Yunque (UJS-PO), en la presidencia del centro, batallaron durante todo el año contra el ajuste de Macri/Vidal sin ocultar el rol del rectorado, que boicoteó nuestra lucha por el boleto estudiantil e intentó ajustar el presupuesto para los viajes de estudio de las distintas carreras. Peleamos por becas integrales que verdaderamente frenen la deserción, mientras las becas otorgadas por la gestión no alcanzan los $900 mensuales. Pero lo que más molesta es que sistemáticamente debatimos junto al estudiantado la necesidad de intervenir en la crisis de manera independiente y junto a los trabajadores, como único camino para defender nuestro derecho a cursar en la universidad pública bajo condiciones dignas.

Con tal de desactivar la organización independiente del Ceungs, la rectora que se reivindica feminista no tiene empacho en empujar a la presidencia del centro a los Pro Aborto Clandestino del Puente. Las mujeres y disidencias que apoyan al FUNYP o son parte del “Frente de Mujeres Ungs” tienen la posibilidad de darle la espalda a esta capitulación y sumarse junto a la izquierda a la defensa de un centro comprometido 100% con la lucha por el aborto legal.

La unidad de la izquierda avanza, aunque todavía no es total. Llamamos a todas las agrupaciones independientes y de izquierda a poner las tareas del movimiento estudiantil por sobre sus intereses, para rechazar el copamiento reaccionario del Ceungs.

Defendamos la independencia política del centro, para enfrentar la profundización del ajuste y dar la pelea por todas nuestras reivindicaciones.