Impulsado por la asamblea "No al cierre de salitas" y organizaciones sociales y políticas más de 200 personas se manifiestaron en este momento frente al palacio municipal del distrito paceño.

 

Este evento se da en el marco de una larga lucha que se viene desarrollando desde los barrios contra el vaciamiento de las salitas y el virulento ataque al sistema de salud en todos sus niveles. Luego de varios reclamos presentados al municipio y frente a la falta de respuesta por parte de los organismos, los vecinos decidieron movilizar para hacer escuchar el reclamo.

 

La movilización, que reclamó el no cierre de los centros periféricos de salud, se desarrolló en un marco más general de ajuste y reducción del presupuesto de salud en toda la línea.

 

Si bien "las salitas" aún no fueron cerradas, los profesionales se ven obligados a renunciar por la falta de pago o son reubicados en los nuevos hospitales municipales. Estos, sin embargo, no cuentan tampoco con los insumos y el personal necesario para atender a la población. Lo mismo sucede con el hospital provincial Mercante, que viene sufriendo recortes desde la gobernación de Scioli, profundizados por la gobernadora Vidal.

Mientras se da esta movilización en el distrito, el gremio de los médicos discute medidas para rechazar la miserable oferta salarial en la provincia.

 

Necesitamos un sistema de salud único que incorpore la mantención de los centros primarios de salud –que permiten la primera atención en las barriadas–, y un aumento de emergencia para el hospital Mercante quien recibe la mayor demanda de la población.

 

El sistema de salud debe contemplar los nombramientos del personal necesario para el pleno funcionamiento de todos los servicios; a su vez, la renuncia sistemática de los profesionales es consecuencia de los salarios paupérrimos que ofrecen desde el Estado. Desde el Partido Obrero en el Frente de Izquierda proponemos un salario igual al costo de la canasta familiar para todos los trabajadores, el aumento inmediato del presupuesto para la salud, la mantención de los tres niveles de salud necesarios, los nombramientos del personal faltante y el pleno funcionamiento de todos los servicios.