Políticas

22/2/2007|981

Votemos por un gran cambio


No habían pasado un par de horas de la oficialización de las listas para las elecciones del once de marzo, cuando estalló la crisis que se encontraba en estado latente en los dos frentes patronales. Denuncias de manipulación en la formación de las listas, renuncias de candidatos. No debería sorprender. La coalición oficial amalgama los componentes más disparatados, por ejemplo a los radicales K y a los radicales L, más una parte del Frente para la Victoria y una parte también del PJ. Del lado del justicialismo ocurre lo mismo: hay kirchneristas, duhaldistas y, como ocurre con Barrionuevo, el duhaldismo que co-gobierna con Kirchner. Lo peor, sin embargo, estaría por venir, pues se dice que Barrionuevo podría renunciar a su candidatura si las encuestas le siguen dando un bajo índice de intenciones de voto.


 


Este desaguisado se explica por la política del gobierno nacional, que ha pactado un canje de favores con las camarillas provinciales: Kirchner disolvió el Frente para la Victoria para las elecciones provinciales a cambio del apoyo del PJ y del Frente Cívico a las listas nacionales que la Casa Rosada pretende confeccionar para las elecciones de octubre próximo. Este enjuague entre el ‘gobierno nacional y popular’ y las camarillas de los latifundistas establecidos en Catamarca no deja de tener su lado ‘principista’, pues unos y otros coinciden en la defensa a muerte del pulpo minero que explota la mina de La Alumbrera. El pulpo en cuestión obtiene ganancias sin precedentes de la extracción del cobre, del oro y del molibdeno. De paso, contamina a varias provincias al mismo tiempo: la propia Catamarca, Santiago del Estero y Tucumán — y lo que podría ser incluso más grave, las dejaría sin agua en un futuro cercano. La empresa pública YMAD, que es una ‘caja’ que maneja el ex jefe de la Coordinadora Radical, Coti Nosiglia, se apresta a licitar 120 bloques mineros luego de octubre. La financiación de las inversiones de una nueva mina, Agua Rica, se haría con parte de las ganancias de La Alumbrera.


 


Huelga provincial de la Salud


 


Pero mientras la política capitalista y las reyertas entre las camarillas se ponen en evidencia, al menos parcialmente, ante el conjunto de la población, hay una serie de factores que muestran que las aspiraciones populares marchan por un carril separado de las de los Brizuela y Barrionuevo. La huelga de los trabajadores de la salud es un ejemplo en ese sentido. Los “Autoconvocados de la Salud” inician esta semana el paro más largo desde que comenzó la lucha: una huelga de 96 horas, con asambleas permanentes y una gran movilización el viernes próximo. El ya se está extendiendo al conjunto de la provincia; varios directores y profesionales han presentado sus renuncias; incluso el conjunto del cuerpo del hospital de la capital. Los trabajadores reclaman aumentos salariales, el pase a planta de los transitorios y de los planes, y el abastecimiento de insumos y de instrumental médico.


 


Los ‘operadores’ de Barrionuevo aspiran a que la huelga deteriore políticamente al gobierno, pero evitan todo lo que pueda llevar al triunfo a los trabajadores: concretamente, los gremios de la salud y la CGT le dan la espalda la lucha. Por eso ha surgido el movimiento “autoconvocados” .


 


Llamamos a votar la huelga indefinida con el mantenimiento de las urgencias.


 


Jubilados


 


También se encuentra en pie de guerra un sector de jubilados. Exigen que se les reconozca el 82 % móvil que gozaban, en calidad de derecho adquirido, desde antes de la transferencia de la caja provincial a la Nación, y el pago de la deuda correspondiente desde 1995. El gobierno de Brizuela dictó una resolución tramposa: reconoce el 82 % móvil para los jubilados previos al 95, pero sobre la base del salario básico ( no toma en cuenta la parte “no remunerativa”, que en muchos casos alcanza a casi el 50 % del salario); no establece la movilidad, pues la limita al presupuesto 2007. Los jubilados de la ex caja provincial han rechazado el planteo. El PO, que apoya esta lucha, plantea que la vigencia del 82 % móvil debe ser para todos los jubilados, sin excepción, de antes o después del 95, y que debe calcularse sobre el promedio de los diez últimos salarios ajustado por la inflación. Catamarca está en condiciones excepcionalmente favorables para cumplir con este reclamo debido a las ganancias fuera de serie de los terratenientes olívicolas y los pulpos mineros, sobre los que debería aplicarse un impuesto especial permanente. Sería un paso que iniciaría una revolución en todo el sistema jubilatorio de Argentina.


 


Alicia


 


La presencia de Alicia Kirchner, esposa del ‘operador’ kirchnerista ‘Bombon’ Mercado, en el interior catamarqueño sirvió para hacer crecer la disputa de aparato entre las fuerzas patronales, pero de ninguna manera para resolver los problemas de los explotados de la provincia. Ni una palabra sobre la huelga de la salud; nada sobre la contaminación ni sobre los reclamos de los jubilados. La Ministra de Acción Social pasó por la provincia dándole la espalda a la situación social explosiva del pueblo.


 


Catamarca, de un modo general, ha ingresado desde hace tiempo en el proceso convulsivo que caracteriza a todo el noroeste. El ‘quietismo’ de las masas provinciales se concentra en focos determinados, pero no es general, lo cual vale para la clase media. A la lucha por los derechos humanos y a los movimientos piqueteros se suman los movimientos sindicales de la salud y de la docencia, y los movimientos ambientalistas; la minería y el olivo han provocado un desequilibrio en las fuerzas sociales, incluso dentro de los grupos capitalistas, que se refracta de una cierta manera en la crisis de los partidos y de los clanes.


 


Esto explica, en parte, que en 2005 el Frente para la Victoria derrotara al Frente Cívico y al PJ y que se redujera el voto en blanco. Habrá que ver que efecto tiene en el electorado la liquidación del FpV en esta ocasión. El voto en blanco, de cualquier modo, podría sufrir una crisis luego de esta experiencia. Nuestro partido llama a las a votar y a aprovechar las elecciones para meter una bancada obrera y socialista en la Legislatura.


 


O sea que estamos empeñados en abrir un surco en este escenario convulsivo e inquietante, desarrollando una salida de conjunto a las infinitas protestas parciales o atomizadas. Nuestra campaña electoral se refuerza día a día, como consecuencia de la crisis por arriba y de las inquietudes desde abajo. Tenemos que vencer la cláusula proscriptiva que exige un piso del 4% del padrón electoral, en una situación en que el 60% tiende a no votar o a hacerlo en blanco — es decir que hay que obtener el 8% de los votos válidos.


 


Tenemos que reforzar de aquí al 11 de marzo la campaña electoral del Partido Obrero en Catamarca.