Desde hace un tiempo, comenzó a organizarse un núcleo del Polo Obrero en La Lonja. Surgió así la idea de una huerta comunitaria: se buscaron tierras en préstamo, se presentó un proyecto al municipio y petitorios a los countries que rodean al barrio (en los que se reclamaban, también, medicamentos, alimentos y pañales). Se reunieron 40 vecinos, que marcharon con sus hijos a presentar los reclamos. Se formó una comisión y se eligieron delegados.

Se obtuvo el compromiso de uno de los countries de poner un cerco perimetral a las tierras e instalar una bomba de agua. Ante la falta de respuesta, se decidió marchar nuevamente al segundo country. Los delegados rechazaron la oferta de recibir la ayuda alimentaria a través de Cáritas (están cansados de sus tratos discriminatorios) y exigieron que fuera entregada en el lugar donde se hacen las asambleas. Después de una hora y media de tensión, se lograron 40 bolsones de alimentos, la entrega de medicamentos contra receta, pañales y leche para los bebés, y el compromiso de compra de dos vacas, 400 gallinas y 200 gallos para instalar la granja. También se obtuvo el compromiso de la contratación de desocupados del barrio para la realización de changas en el country. Los aplausos sonaron fuerte en la puerta al anunciarse lo obtenido.

Ahora, los compañeros están organizando una marcha a Edenor por la “tarifa social” y la amnistía de las deudas; luego vendrá el reclamo al municipio por puestos de trabajo para la huerta.

Es un buen comienzo.