Provinciales

26/11/2015|1391

Asamblea de vecinos por el techo propio


En Villa Regina, provincia de Río Negro, en un valle agrícola de 4.500 hectáreas de meseta pobladas de escorpiones, hay planes de vivienda a cuentagotas y sólo para ingresos superiores a los 15.000 pesos, mientras decenas de familias no tienen siquiera acceso a un terreno.


En febrero de 2014 se reunieron, por primera vez, 13 familias para fundar la Asamblea de Vecinos por el Techo Propio, impulsada por el Partido Obrero. 


 


Caracterizamos allí al plan Procrear como el guiño del gobierno del FpV para disparar el precio de las propiedades, en beneficio de la especulación inmobiliaria. El precio de un terreno de 10x20 metros trepó entre 200 y 300 mil pesos, mientras que el ingreso promedio de los trabajadores no supera la tercera parte del costo de la canasta familiar patagónica, valuada en 15.000 pesos. 


 


Ante este cuadro votamos un programa:


• Terrenos para todos.


• Ninguna entrega en concepto de anticipo.


• Cuota del 5% del ingreso familiar.


• Independencia del gobierno de turno.


• Movilización y organización como método para lograr los puntos reclamados.


 


Agrupamos 120 familias. Cada vecino trajo una cartulina y nosotros mismos preparamos las encuestas sociales y les llevamos las carpetas a la Comisión de Asuntos Sociales del Concejo Deliberante, para implicar a todos los bloques e impusimos que la evaluación se hiciera en el propio concejo, ya que la propuesta “esperá que ya te va a ir a ver la asistente social” era una maniobra, pues estos vecinos ya deben tener 3 ó 4 informes sociales y ninguna respuesta. 


 


Hicimos varias actividades: marcha al municipio, a la plaza, a los actos oficiales y otros, y logramos poner en la agenda pública el reclamo de los vecinos. 


 


Pasamos de “sin entrega es imposible, tierras no hay, con esa cuota ni sueñen, vendan sus motos (en un pueblo donde no hay colectivos y las distancias se miden en kilómetros, no en cuadras) y plata tampoco hay, y si quieren en tres años, cuando urbanicemos la meseta, hablamos” a conquistar 120 lotes, sin entrega y en cuotas de 500 pesos, precio final 25.000 pesos, aprobado esta semana.


 


Fuimos tenaces y demolimos cada uno de los argumentos del gobierno, mientras se les negaba la tierra a los vecinos denunciamos en el propio Concejo Deliberante la hemorragia sin fin del pago de la deuda externa, el saqueo por el IVA y el Impuesto a las Ganancias, el subsidio de 90 millones de pesos del gobierno de Wereltineck-Cristina a la patronal agraria, 1 millón de pesos de regalito del gobierno provincial al Colegio de Abogados, 170 millones de pesos para la policía, producto de la renegociación de los contratos petroleros.


 


¿Cómo aceptar, entonces, que el gobierno no tiene plata? Los dejamos mudos. También soportamos provocaciones en la línea de que la destrucción del monte frutal sería culpa del loteo social y no de la crisis capitalista.


 


La experiencia recorrida ha producido un gran impacto entre los vecinos. Algunos participaban de asambleas y marchas y otras actividades por primera vez; alternativamente han participado del Congreso del Luna Park, la marcha por Daniel Solano, la marcha por Ni Una Menos, con nuestras consignas y, recientemente, en el Primer Congreso de Tierra y Vivienda de Río Negro y Neuquén, y fiscalizaron la última elección general.


Están dadas las condiciones, si lo hacemos bien, de continuar elevando la conciencia de estos compañeros para ganarlos a la construcción política del Partido Obrero. A pesar de la vergonzosa proscripción al partido en las elecciones municipales y provinciales, tomamos lo que dijo nuestro compañero Pitrola: todos los militantes somos parlamentarios de la clase obrera aunque no tengamos una banca.


 


Lo que hemos logrado será preparatorio de las luchas que faltan: por el gas, por los materiales de construcción, etc. Hay un programa, hay equipo: ¡manos a la obra!