Van muchos años de lucha de la juventud para conquistar el boleto estudiantil gratuito. Hace un tiempo, después de tanta promesa incumplida y de leyes sin reglamentar, se anunció que se ponía en vigencia. Pero este año la implementación ha terminado en un papelón.

Primero, iba a abrirse una inscripción hasta el 31 de marzo, pero el 17 se informó que el 18 del mismo mes se vencía el plazo para solicitar el beneficio, resultando ser este el día siguiente al inicio de clases en las universidades e institutos terciarios, cuyos estudiantes no alcanzaron a tramitar el certificado de alumno regular para presentar en la empresa de transportes.

Hay que tener en cuenta que el boleto de colectivo en Río Gallegos pasó de $200 a $800. La reacción de los estudiantes los llevó a reclamar ante las autoridades en Casa de Gobierno, donde se prometió que se iba a resolver y mantener abierta la inscripción.

No solo que esto no se cumplió sino que se obliga a los beneficiarios y las familias que lograron anotarse a tener que ir, una vez por semana, a efectuar la carga en la SUBE. Formándose largas colas de gente, desde horas muy tempranas; una actitud de maltrato que debería avergonzar a las autoridades responsables.

“Este manoseo no se puede soportar más” sostuvo Ignacio Díaz, referente de la UJS en la UNPA-UARG, y señaló que “necesitamos que se implemente la carga mensual de la SUBE inmediatamente y que se abra la inscripción a quienes necesiten usar el colectivo para llegar a estudiar”.

Es claro que el gobierno de Claudio Vidal debe dar una respuesta a estos reclamos y garantizar el acceso y la permanencia de las y los estudiantes en el sistema educativo.

https://prensaobrera.com/sociedad/un-alarmante-indice-de-pobreza-y-un-movimiento-piquetero-que-sale-a-las-calles

https://prensaobrera.com/politicas/los-medicamentos-aumentan-mucho-mas-que-la-inflacion-y-se-derrumba-su-consumo