Salud

18/3/2024

Adorni reafirmó que no incluirán la vacuna del dengue en el calendario obligatorio

La política del gobierno es dejar que la epidemia se agrave.

Récord de contagios y de muertes por dengue.

A pesar del récord de casos y muertes por dengue, el vocero presidencial, Manuel Adorni, dijo claramente que el gobierno no tiene previsto incluir la vacuna dentro del calendario, ni siquiera considera reactivar la pauta oficial para difundir la campaña de prevención y detección temprana. En resumen, deja a la población a la deriva frente a esta epidemia, sobre todo a aquella de menos recursos, que no puede acceder ni a la vacuna ni a los repelentes.

En cuanto a la vacuna contra el dengue, Adorni reprodujo los mismos argumentos que había expresado anteriormente el ministro de Salud, Mario Russo, para justificar su exclusión del calendario gratuito de vacunación: “la vacuna no está recomendada como estrategia de salud pública para evitar la propagación de la enfermedad, debido a que la misma requiere de dos dosis, con un intervalo de tres meses para alcanzar una adecuada protección para la población”. Además agregó que todavía no está comprobada su eficacia.

A contramano de esas afirmaciones, según la Organización Panamericana de la Salud, dicha vacuna “demostró su eficacia en países endémicos para prevenir la enfermedad sintomática del dengue (confirmado virológicamente) y la hospitalización en niños de 4 a 16 años seropositivos (con infección antes de la vacunación) frente a los cuatro serotipos del virus”. En ese sentido, la Organización Mundial de la Salud recomendó su aplicación en niños de 6 a 16 años que viven en entornos con alta carga de enfermedad. Además, la vacuna está aprobada por la Anmat desde abril 2023.

Por otra parte, la demora en alcanzar la inmunidad no es un argumento válido para no universalizar el acceso a la vacuna. Las personas que se la apliquen ahora, quedarán inmunizadas para la próxima temporada epidemiológica del dengue. De lo contrario, aquellos que se infecten por segunda vez, correrán mayor riesgo de que la enfermedad se agrave.

Sin embargo, el gobierno ya decidió que no gastará un solo peso en llevar adelante un plan de vacunación, mostrando lo poco que le importa resguardar la vida y la salud de la gente. Los más perjudicados son los sectores de menos ingresos, que difícilmente tengan el dinero para costear una vacuna cuyas dosis superan los $70 mil cada una. El abordaje de esta epidemia por parte del oficialismo es lisa y llanamente un “sálvese quien pueda”.

Tampoco impulsa campañas preventivas acerca de cómo evitar que se reproduzca el mosquito Aedes aegypti al interior de los hogares y qué hacer ante el contagio. No se realizan operativos territoriales que tengan esa finalidad ni, como aclaró Adorni, habrá pauta oficial alguna destinada a difundir esa información.  Menos aún existen dispositivos para distribuir repelentes de manera gratuita entre quienes no pueden comprarlo, con precios que rondan los $6.000. Por otro lado, producto del ajuste, fueron diezmadas las cuadrillas destinadas a desmalezar los espacios verdes y destapar desagües pluviales en la vía pública.

Así las cosas, el virus se sigue propagando: según el último Boletín Epidemiológico Nacional, en lo que va del 2024 se notificaron 102.898 casos de dengue (11,3 veces más que en el mismo período del 2023), 22.721 de los cuales pertenecen a la provincia de Buenos Aires, y 69 fallecidos. La situación se agravará como resultado de las lluvias torrenciales de la semana pasada.

La hospitalización por dengue sobrecarga un sistema de salud cada vez más desfinanciado, dejando en evidencia la escasez de personal de salud, la precariedad laboral en la que se encuentran y la falta de insumos como reactivos PCR para realizar test rápidos, etc. Frente a este brote de dengue, se vuelve fundamental reforzar el presupuesto destinado a hospitales y salitas.

La motosierra de Milei nos deja completamente desarmados para transitar esta epidemia. Debemos organizarnos en cada barrio para exigirle a los gobiernos nacional, provincial y municipales la entrega gratuita de repelente, campañas de desmalezamiento y drenaje de acumulación de agua en la vía pública, presupuesto para salud y la puesta en marcha de un plan de vacunación contra el dengue, que sea gratuito y esté financiado con un aumento de la alícuota de Ingresos Brutos que pagan los laboratorios farmacológicos, que vienen haciendo fortuna con la suba de los medicamentos. Así lo plantea el proyecto de ley presentado por el Partido Obrero en la Legislatura porteña, como un aporte a la lucha en defensa de la salud pública.