Salud

17/10/2020

Argentina 6° en el (triste) ránking de contagios por coronavirus

Déficit de testeos por parte del gobierno y falta de conducta de aislamiento por parte de las patronales.

El día 15 de octubre se marcó un nuevo récord en la contabilidad de contagios de coronavirus que ascendió a 17.096 en la Argentina y 421 muertes. Con estos datos el total de infectados asciende a 949.063 y las víctimas fatales suman 25.342. Argentina quedó ubicada dentro de los seis países con mayor cantidad de contagios pero todavía no alcanzó el pico nacional.

La incertidumbre con la que se maneja el Ministerio de Salud es alta ya que no se ha dado una política de testeos que sirva para seguir el “camino” del virus. Al comienzo de la pandemia el promedio de positividad era de 41,5%, en la actualidad ha aumentado y alcanza el 59%, una muestra de que las autoridades sanitarias no han podido anteponerse al circuito del virus. Cuanto más testean, más aumentan los positivos. Este cuadro ejerce una mayor presión sobre el sistema sanitario y el personal que ya está muy agotado.

La comparación en este rubro, con otros países, es muy llamativa en Estados Unidos, ese índice es del 6,8 por ciento; en India, del 8,11; en Brasil, del 28; en Rusia, del 2,4; en Colombia, del 22,3; en Chile, del 13,2; en Italia, del 2,8; en Reino Unido, del 2,2; en Francia, del 5,7; y en Suecia, del 5,8.

Una alta tasa de positividad acompaña la masividad de los contagios. A esto lo acompaña que la Argentina es un país con un bajo nivel de testeos se realizaron cerca de 2 millones de test -en el lugar 119° en cantidad de test por habitantes, según la base “Worldometers”- (chequeado 9/10). El gobierno no destinó el presupuesto necesario para un arma que se ha demostrado en otros países como de cierta efectividad.

Por su parte las patronales no han adoptado una conducta de aislamiento correspondiente. Eso demuestra los altos porcentajes de trabajadores esenciales contagiados y también de personal de salud. Ante esta panorama, los gobiernos no han inspeccionado ni clausurado los lugares de trabajo  por lo tanto la ruta del virus se ha masificado.

Tampoco ha unificado las políticas entre la Nación y las provincias, que hace que hoy la situación en el interior se haya desmadrado. En primer lugar ante el aperturismo furioso a grandes sectores comerciales y de la industria, pero también ante la falta de una centralización sanitaria.

La inexistencia de un comando único llevó al Ministerio de Salud Nacional a correr detrás de los problemas. Por eso ha lanzado campañas de reclutamiento de personal sanitario cuando el sistema sanitario en Jujuy, primero, y luego en Neuquén y Río Negro habían colapsado con tasas de ocupación de más del 90%.

Una salida de los trabajadores

La conducta de la clase trabajadora es decisiva para frenar este descontrol. Hay que reclamar y organizar el control obrero sobre los protocolos y su cumplimiento, en los lugares de trabajo y los transportes, como lo hacen los del gremio del Neumático, los del Inti, los del Subte y los de supermercados. Apoyar a fondo la lucha de los trabajadores de Salud y sus reclamos. Y exigir con fuerza desde la base de las organizaciones obreras y las barriadas, el seguro de 30.000 pesos a los trabajadores sin ingresos, un verdadero impuesto a las grandes fortunas  y el cese inmediato del pago de la deuda externa, para volcar fuertes recursos a la lucha por la salud y la vida del pueblo.