Salud

19/6/2020

Córdoba: brote de contagios de Covid-19 en Traslasierra

Los gobiernos provincial y municipal son responsables.

Hay al menos 18 casos de Covid-19 en el Valle de Traslasierra, en la provincia de Córdoba. El brote se produjo por responsabilidad de quienes gobiernan porque no se realizaron los controles correspondientes. La ciudad de Villa Dolores, epicentro de los contagios, vuelve a fase 1, mientras se espera por el resultado de los 300 hisopados realizados. El brote tuvo ramificaciones en la ciudad de La Falda, lugar en donde residen personas contagiadas que habían ido a trabajar al Valle.


Luego de más de 90 días de cuarentena y entrando en una fase de flexibilidad por ser una zona blanca, el pasado martes los pueblos que integran el valle recibieron la noticia de que un efectivo de la policía de Córdoba contrajo coronavirus. El efectivo realizaba actividades dentro del valle, más específicamente en Las Tapias, aledaño a Villa Dolores.


Los medios de comunicación, la dependencia policial y los gobiernos locales se encargaron de hacer saber que el policía no había realizado actividades fuera del valle por lo que esto encendió la alarma a los habitantes de la zona. Porque en el lugar donde se presenta el contagio es la referencia de gran parte de Traslasierra para tramites y compras. Días atrás se había habilitado la libre circulación y las reuniones familiares en todo el corredor departamental de Minas, Pocho, San Alberto y San Javier.


Luego de que se realizaron las conexiones y los recorridos que el efectivo policial había desarrollado, llegaron a la conclusión que el foco de contagio se podría haber desarrollado en el Banco Nación de Villa Dolores que estaba en mantenimiento por operarios llegados días antes desde la provincia de Buenos Aires.


Luego de los correspondientes hisopados, los tres operarios, la madre y dos vecinos dieron positivo, con lo cual al día de la fecha ya se detectaron siete casos y se está a la espera de los hisopados que se realizaron el día miércoles en la ciudad de Villa Dolores.


Crónica de un contagio evitable


Desde que comenzó el aislamiento obligatorio fueron recurrentes las manifestaciones de la población por la falta de insumos y controles al ingreso al valle por la ruta de las altas cumbres, principal acceso de todas las personas que vienen de la ciudad de Córdoba, como así también ingreso de mercaderías y recursos.


Cabe recordar que hace aproximadamente un mes el personal médico del dispensario de Las Rabonas se vio forzado a renunciar, y entre una larga serie de causas, también se encontraba la ya mencionada falta de recursos e insumos médicos.


Otro de los factores que fueron expuestos desde el principio, incluso por el personal médico, fue el traslado y permanente circulación del personal policial a lo largo del valle, la recurrencia de prestar servicios en zonas rojas de la provincia y la excesiva “flexibilidad” entre el personal policial.


Todos estos hechos, más el recorte en salud, evidenciado en la precariedad en que viven los profesionales, con contratos de tres meses que muchas veces no son renovados, han sido objeto de denuncia por parte de la mesa de Derechos Humanos de Mina Clavero y Traslasierra.


La precariedad del sistema de salud del valle, que cuenta solo con ocho respiradores para más de 90 mil habitantes y las pocas ambulancias disponibles son un hecho reprochable antes y durante la pandemia.


En una zona de altísima precariedad e informalidad laboral, donde muy pocos han accedido al IFE, que claramente no alcanza, y donde el pueblo trabajador se ve obligado a salir a hacer changas para llegar a fin de mes, era solo una ilusión creer que nos encontrábamos exentos del virus.


Para garantizar la salud de la población es necesario que se respondan a los reclamos de las y los trabajadores de la salud, y se garanticen los recursos para el aislamiento social: con hambre no hay cuarentena.