Salud

17/6/2021

Córdoba: ¿Cómo enfrentamos el colapso en los hospitales?

El cuadro epidemiológico se agrava, y el gobierno, en lugar de responder reclamos, persigue a trabajadores de la salud.

Medica obstetra MP 31274. Hospital Eva Perón

Imagen extraída Radio Mitre

Córdoba se encuentra en situación de colapso sanitario. Día a día se suceden informes oficiales que dan cuenta de más personas fallecidas por Covid-19. Además, las altas cifras de contagios que ubican a la provincia como el segundo distrito más afectado en todo el país prefiguran un panorama dramático.

El cuadro epidemiológico de la provincia indica que los casos de coronavirus se encuentran distribuidos en 202 pueblos y ciudades. El interior provincial, de acuerdo al informe oficial del pasado miércoles, registró en ciudades como Río Cuarto 146 contagios, en Jesús María 127, Villa María con 78, Alta Gracia 75 y San Francisco 68; Santa Rosa de Calamuchita 20 y Villa General Belgrano registró 23 contagios.

Todo lo señalado repercutirá aún más en un sistema de salud en el que sus trabajadores están saturados. Los anuncios del gobierno de levantar algunos hospitales modulares o declarar “Código Rojo” no implican una respuesta acorde con la crítica situación, sencillamente porque el personal de salud es el mismo, es decir, no se responde al planteo de incorporar más personal. Esta medida la venimos solicitando desde hace años.

En este marco, el ministro de Salud, Diego Cardozo, no hace más que deslindar responsabilidades en quienes somos la primera línea de batalla en los hospitales y en la población, sin siquiera reflexionar sobre las medidas no ejecutadas por el gobierno provincial para adecuar los sistemas de salud a la necesidad de una crisis sanitaria sin precedentes como la que estamos atravesando.

El personal de salud viene denunciando desde el inicio de la pandemia las indignas condiciones laborales y la escasez de recursos materiales y humanos en los hospitales de la provincia. La respuesta por parte del gobierno es nula.

“Lamentablemente se cumplieron todos nuestros pronósticos, la crítica y dramática situación sanitaria que atraviesa nuestra provincia es la crónica de un colapso anunciado y responsabilidad del gobierno de la provincia, que ha pasado por alto todas las alertas que no solo planteamos desde la Multisectorial sino también de reconocidos sanitaristas y epidemiólogos. El ejecutivo provincial, bajo su lema de “Córdoba no para”, nos ha llevado a esta verdadera catástrofe sanitaria. Mientras el gobernador Schiaretti repetía hasta el cansancio que nuestra provincia era la que “más actividades tiene autorizadas”, crecieron los contagios y las muertes” remarcaron desde la organización en La Nueva Mañana.

“En este cuadro dantesco los trabajadores y trabajadoras de la salud desempeñamos nuestras tareas verdaderamente agotados psíquica y mentalmente después de más de un año de arduo trabajo y en pésimas condiciones laborales y salariales. Nuestros compañeros siguen muriendo a pesar de estar vacunados y entendemos que no es una situación fortuita, los cuadros de estrés agudo, trastornos adaptativos y síndromes de burnout sin duda impactan negativamente en nuestro sistema inmunológico” agregaron.

En la descripción del cuadro crítico hay coincidencia, pero es necesario establecer una intervención de frente único, en la perspectiva de la experiencia que se desarrolló en Neuquén. En la provincia patagónica una acción independiente y de conjunto arrancó gran parte de los reclamos.

El personal de salud se está muriendo aún habiendo sido vacunado. No nos están haciendo dosaje de anticuerpos post vacunación y los sistemas inmunes de quienes estamos batallando a diario en los hospitales están debilitados por el agotamiento, la precarización laboral, el pluriempleo consecuente de los bajísimos salarios y un estado de “burnout” que nos deja desnudos de defensas ante esta batalla.

El gobierno de Schiaretti continúa negando la evidencia y sometiendo al personal de salud y a los pacientes que ingresan al sistema al espectáculo lamentable de un agotamiento sanitario que pudo haber sido previsto y mejorado, pero que no es más que la sumatoria de manotazos de ahogados y la consecuencia de un vaciamiento histórico del sistema de salud cordobés en manos de una gestión de gobierno que prioriza hacer rutas, como la autovía de Punilla, por sobre cuidar a su gente.

Ante semejante panorama, la única salida posible es desarrollar un plan de lucha. Para no seguir muriendo tenemos que exigir que se destine mayor presupuesto a salud, que regularice nuestros salarios acordes a la canasta familiar, que se pase a planta a todes les compañeres precarizades, que se contrate más personal en todos los hospitales de Córdoba y para todas las áreas.

En el presente cuadro de colapso sanitario urge que se provean los insumos necesarios para la asistencia de la población, que se realicen testeos de anticuerpos en el personal de salud y se priorice la vida de las personas por sobre cualquier otra actividad verdaderamente no esencial. Solo lxs trabajadores podemos darle una salida a la crisis.