La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro  (Agtsyp) informó, como viene haciéndolo regularmente, que suman 33 los trabajadores contagiados por Covid–19 en el Subte. A lo que hay que agregar 7 más fuera de convenio no contabilizados. Desde el comienzo del desarrollo de la pandemia en el país, los trabajadores del Subte vienen imponiendo medidas de protección elementales, contra la presión de la empresa que coloca como prioridad la continuidad del tráfico, violando muchas veces las normas de bioseguridad. Se llegó a ocultar la existencia de casos sospechosos y por lo tanto su aislamiento y el de sus contactos estrechos. Se retaceó, durante todo un período, la provisión suficiente de insumos de seguridad de calidad. La desinfección de formaciones e instalaciones también fue una fuerte pulseada que llegó a expresarse en cortes de líneas, que fueron reprimidos con la detención policial de delegados. En todos los casos, los trabajadores tomaron en sus manos la solución, apelando, muchas veces, a la acción directa: paros de línea hasta que se aislara y testearan los trabajadores sintomáticos; plenarios por sector para establecer protocolos específicos, en talleres, estaciones y tráfico. A lo que hay que agregar la abstención de tareas en sectores contaminados por asbesto cuyo efecto patógeno puede potenciar las consecuencias del Covid–19.

La presión de la acción gremial obligó a aplicar un esquema de trabajo por el que se establecen grupos de trabajadores aislados entre sí, que no se cruzan en los cambios de turno, ni comparten espacios comunes, como los comedores o salas de descanso, muchos de los cuales fueron cerrados. Así, cuando aparece un caso sospechoso se aísla todo ese grupo, hasta que se descarte la infección del compañero.

El reclamo de la Agtsyp para que los protocolos y decisiones contra el Covid-19 fueran compartidos por el sindicato en un Comité Covid fue ignorado por el gobierno sin que diera lugar a una reacción del sindicato. En el mismo sentido, la mayoría del Ejecutivo del sindicato desestimó la propuesta de los delgados de la Agrupación Naranja, de elaborar un protocolo propio de la Agtsyp –como lo hizo el gremio del neumático (Sutna)– enriquecido con los aportes de los diferentes sectores de trabajo y la organización de comisiones de Seguridad e Higiene en todas las líneas, que garanticen su aplicación. El avance de la circulación del virus exige dejar de lado toda vacilación y que los trabajadores tomen las riendas en favor de su propia salud.

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