Un día después de perder las elecciones nacionales, el macrismo se despachó con un nuevo ataque contra el sector de Enfermería.

A través de la Resolución N° 3418 del Ministerio de Educación, el gobierno nacional establece que el título de “Licenciado/a en Enfermería” de 20 institutos educativos de todo el país (ver lista al final de la nota) deje de tener validez y reconocimiento oficial. El criterio utilizado es que los títulos de esas 20 universidades no reúnen los requisitos para la acreditación de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CoNEAU). 

El impacto de esta medida debe comprenderse a la luz de las condiciones de trabajo y de estudio de las enfermeras y los enfermeros. Sucede que quienes estudian la licenciatura en enfermería en general ya cuentan con el título de enfermero/a profesional, y realizan un ciclo complementario para obtener la licenciatura mientras se desempeñan en su profesión. Los bajos salarios y las largas jornadas laborales, estiradas con los miserables módulos o con doble cargo, dificultan enormemente la cursada de la licenciatura, sobre todo cuando en los institutos públicos no se cuenta con triple franja horaria. El hecho de que una porción importante de los enfermeros del sistema de salud tengan sólo la titulación de enfermero profesional fue tomado como argumento por el gobierno de Rodríguez Larreta para negar la inclusión en la carrera profesional. En este cuadro, la disposición nacional no hace más que reforzar la precarización del sector, nivelando hacia abajo. 

Lejos está la medida de defender la calidad de los títulos de los enfermeros, ya que el criterio que se establece para certificar esa “calidad” son los estándares de la CoNEAU, un organismo creado por la Ley de Educación Superior menemista (y mantenido durante los gobiernos kirchneristas y el macrista) para degradar las carreras universitarias y amoldarlas a las necesidades del mercado, regido por la precarización laboral. En este punto, la trampa de esta medida es doble, ya que por un lado se le impone a 20 carreras de enfermería pasar a tener un rango menor, y por el otro se refuerzan los criterios de la CoNEAU a la hora de acreditar: de una forma u otra, se busca descalificar a las carreras. Esta política ya se había plasmado en el 2018 con el intento (fallido) de degradar el título terciario de la escuela Cecilia Grierson, acortando la carrera a dos años y medio.

La resolución ministerial va en línea con la exclusión de Enfermería de la carrera profesional de salud en la Ciudad de Buenos Aires, que Horacio Rodríguez Larreta ratificó en su reforma ajustadora del área a fines de 2018, consagrando una diferencia salarial y de convenio de peso y desatando una rebelión de enfermeras y enfermeros con más de hasta 20 mil personas. En este proceso, el jefe de Gobierno contó con la complicidad de Amadeo Genta (de la gremial Sutecba), con quien llegó a firmar en conjunto una repudiada carrera trucha. Al trabajo descalificado, con bajos salarios y un convenio desfavorable, se lo busca ahora cristalizar con formación descalificada.

Para quienes crean que este panorama puede cambiar con la asunción de Alberto Fernández sencillamente cultivan falsas esperanzas. Por un lado, basta recordar que los tres gobiernos kirchneristas no sólo mantuvieron la Coneau, y con ello la política menemista para la educación superior, sino que la profundizaron, buscando la acreditación masiva de las carreras universitarias. Por otro lado, debe tenerse presente que Amadeo Genta, el enemigo declarado de Enfermería, se encuentra en la primera plana de los sindicalistas que se alinean con el nuevo gobierno y defienden un pacto social que congele salarios y modifique convenios colectivos. Dime con quién andas…

La única salida para enfrentar estos ataques es la organización independiente de trabajadores y estudiantes de Enfermería respecto de los gobiernos y la burocracia sindical. 

Desde la agrupación Naranja de Enfermería llamamos a retomar el camino trazado por las grandes movilizaciones en la Ciudad, para defender las carreras y las condiciones de trabajo; peleando por la derogación de esta resolución y el pase a la carrera profesional; y defendiendo la formación para la licenciatura en Enfermería en horario y sede de trabajo, mediante un sistema público, gratuito y de calidad. Preparemos una gran movilización para el día del enfermero, este 21 de noviembre.

En este camino, el miércoles 13 de noviembre a las 18 h haremos en la Legislatura porteña una charla debate sobre el tema con el legislador del Partido Obrero-Frente de Izquierda, Gabriel Solano. 

Listado de universidades afectadas:

Instituto Universitario Cemic 

Instituto Universitario de la Policía

Federal Argentina 

Pontificia Universidad Católica Argentina "Santa María De Los Buenos Aires" 

Universidad Austral 

Universidad Autónoma de Entre Ríos 

Universidad Católica de Córdoba 

Universidad Católica de Santa Fe 

Universidad del Aconcagua 

Universidad del Salvador 

Universidad Isalud 

Universidad Maimónides 

Universidad Nacional de Avellaneda 

Universidad Nacional de Córdoba 

Universidad Nacional de Cuyo

Universidad Nacional de Entre Ríos 

Universidad Nacional de Río Cuarto 

Universidad Nacional de San Juan 

Universidad Nacional de Tres De Febrero 

Universidad Nacional de Villa María 

Universidad Nacional del Centro De La Provincia De Buenos Aires