Salud
25/6/2024
Más negocios para las prepagas: el gobierno libera copagos en las prestaciones básicas
Una medida que afecta a millones de trabajadores y restringe aún más el acceso a la salud.
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Ministro de Salud, Mario Russo.
El gobierno sigue avanzando en la desregulación de la medicina privada y las obras sociales, ahora con la liberación de los precios de los copagos establecidos dentro del Plan Médico Obligatorio. Se trata de nuevos beneficios para los capitalistas del sector a costa de un menor acceso a la salud para millones de personas.
La medida fue impulsada desde el Ministerio de Salud que conduce Mario Russo y fue presentada como una “continuidad lógica” de la desregulación de las cuotas de las prepagas que, luego de las idas y vueltas con el gobierno, quedarán bajo el criterio exclusivo de las empresas privadas desde el mes de julio.
Hasta la resolución en cuestión, el Estado determinaba los copagos incluidos en el PMO con la publicación oficial de una tabla de valores, fijando su actualización en relación a la evolución del Salario Mínimo, Vital y Móvil.
Como el gobierno viene licuando el salario mínimo, como parte de sus medidas de ajuste contra la población trabajadora, ahora desligan el valor de los coseguros “regulados” del salario base de los trabajadores, para dejarlo en manos y a criterio de cada empresa y obra social.
Estamos ante una clara medida que afecta unilateralmente a los trabajadores y afiliados y que no guarda ninguna correlación entre los ingresos salariales golpeados por el ajuste y las pretensiones económicas del puñado de capitalistas dueños de la medicina privada.
Como restricción a las empresas el gobierno estableció que para que los aumentos sobre los copagos sean válidos deberán ser notificados fehacientemente con 30 días de anticipación, así como los valores de los aranceles correspondientes deberán ser informados previamente a la incorporación de nuevos afiliados. Además de una lista taxativa de prestaciones que quedarán exentas de dicha liberalización (discapacidad, oncologías, embarazo y recién nacidos, etc.).
Para tener alguna noción de las modificaciones en cuestión tenemos que a la fecha un copago por la atención e un médico generalista o pediatra se encuentra en los $2.019, mientras que un médico especialista asciende a $3.786. Estos valores, ahora, podrían dispararse.
La existencia de copagos se extiende en muchas de las obras sociales vaciadas y desfinanciadas y en gran parte de los planes “low cost” de las prepagas, los cuales ahora tienden a proliferar debido a la inviabilidad económica de los trabajadores de costearse un plan con cobertura integral.
Una de las salidas del gobierno y las empresas de medicina privada a la crisis del sector, con el aumento exorbitante de los planes de cobertura médica, es la edición de “planes básicos”, con coberturas elementales y llenos de copagos con valores que tranquilamente podrían quintuplicar los actuales. Es probable que incluso se tienten a denominar estos planes como “cobertura libre”, u otros eslóganes del tipo “pagas lo que usas”, cuando en verdad estamos ante una nueva estafa y un negocio fenomenal.
Esto se da en el marco de que las empresas privadas, dueñas de parte de las clínicas del sector, vienen pataleando por la condonación de deudas fiscales de más de 5.000 establecimientos que, afirman, están al borde de la quiebra. El gobierno le achaca a estas que no trasladen los aumentos cobrados al pago de las prestaciones y clínicas, mientras que estos responsabilizan al Pami y las obras sociales.
Probablemente esta nueva desregulación responda en parte a este reclamo del sector privado, trasladando la factura de la crisis directamente al bolsillo de los trabajadores.
Hay que terminar con los negocios espurios de los capitalistas de la salud interviniendo todo el sector y abriendo los libros de las empresas privadas, como punto de partida para el establecimiento de un plan universal e integral de cobertura médica, sin copagos ni coseguros, de acceso para el conjunto de los trabajadores. Lo mismo vale para las obras sociales, con la votación e integración de las mesas directivas por parte de los trabajadores y afiliados.