En estos días han llegado a la provincia personas provenientes del exterior o de otras provincias que quedaron varadas en medio de la cuarentena.

Una de esas personas era de Mosconi, el músico Aníbal Quiroga, que quedó varado en Bolivia. Habiendo anunciado su repatriación al llegar al pueblo no había nadie del comité que debe atender estos casos que lo estuviera esperando, además de que no fue llevado hasta su domicilio sino dejado sobre la ruta 34. Allí comenzó una ida y vuelta entre la policía, el personal de salud y del municipio. Ninguna de estas personas tenía claro qué hacer, ni querían hacerse cargo del traslado de esta persona hasta su domicilio.

Quiroga finalmente fue revisado por personal de salud que llegó hasta la ruta y que, según cuenta el músico en Salta/12 (Página 12), se notaban muy nerviosos.

Finalmente lo trasladaron hasta el domicilio que había alquilado para hacer la cuarentena correspondiente. Pero a las dos horas, una ambulancia llegó hasta allí y fue trasladado al complejo deportivo municipal, lugar supuestamente acondicionado para atender los casos de coronavirus. Una vez allí, el músico, grabó videos de las condiciones deplorables en la que se encuentra el complejo y que claramente no son para nada adecuadas para atender la pandemia. Lo dejaron solo en ese lugar sin siquiera dejarle un plato de comida. Un verdadero desastre.

Según señala Salta/12 , el intendente Isidro Ruarte, que recibió hace pocos días 5 millones de pesos del Tesoro Nacional con motivo de la crisis sanitaria, ha reconocido en sus redes sociales el mal estado del complejo e indicado que él no puede estar en todas. El problema es que evidentemente no está en ninguna.

Crisis sanitaria y vaciamiento de la salud

La crisis sanitaria en la provincial no es nueva si tenemos en cuenta que el año pasado el gobierno declaro una emergencia sociosanitaria por la muerte de niños aborígenes por desnutrición con lo cual reconoce la crisis sanitaria y social. La pandemia de Covid-19 viene a agravar la situación de ruina del sistema de salud local por el vaciamiento que los sucesivos gobiernos vienen llevando adelante. Este vaciamiento tiene que ver con la falta de médicos, de insumos, de aparatología, etc.

Para completar este sombrío panorama y producto del papelón, el gerente y el jefe de atención a las personas del hospital presentaron la renuncia en términos indeclinables a sus cargos. Según lo que ellos mismos señalaron, las renuncias fueron motivadas por la falta de recursos y por las presiones que vienen soportando. El ahora exgerente, Marcelo Benavidez, denunció en los medios que no solo falta personal sino que hubo una disminución de personal en la zona.

En medio de la brutal crisis social, con niños que mueren de hambre en la zona, se suma también el crecimiento de los casos de dengue.

Queda claro que es absolutamente imposible que en estas condiciones se pueda satisfacer las necesidades sanitarias de una población que, solo en Mosconi, es de 30 mil habitantes y que en el área de influencia del hospital es mucho mayor.

En la conciencia del vecino quedó claro que el sistema de salud no está en condiciones de atender a ningún paciente, mucho menos a las personas afectadas por el Covid-19.

Ante este brutal panorama, desde el Partido Obrero de Mosconi planteamos que deben designarse de manera inmediata médicos, enfermeros y personal de servicios, la provisión de todos los insumos necesario y un plan de capacitación para la atención de pacientes con Covid-19

Los recursos necesarios para esto pueden salir de una tasa municipal del 6 % a las actividades petroleras y a las sojeras que son grandes actividades económicas que saquean los recursos de nuestro suelo y lo fugan en su mayor parte al exterior, como hemos planteado en oportunidad de tener una banca en el concejo deliberante. Llamamos al pueblo mosconense a reclamar este programa de salida.