Se filtró un audio que la dirección del Hospital Rawson de la Ciudad de Córdoba les dirigió a les trabajadores, en el que da cuenta de las directivas de restringir los testeos de Covid-19 al personal.

“Si son asintomáticos no se hisopa”, dice la doctora Sapia, “por lo tanto, aquellas personas que quieran ir a hisoparse en forma asintomática e irse del hospital y abandonar sus tareas, bueno, después aténganse a las consecuencias, porque esas son medidas tomadas personalmente, no desde el punto de vista médico”. Esto en un hospital en el que se han confirmado ya 18 contagios entre el personal.

La mencionada profesional continúa afirmando que “desde hace unos días, y dado  la gran demanda, hay una disposición que le hemos dado a la gente de la guardia de la covidera, que solamente se va a hisopar personas sintomáticas. El que no tenga síntomas no va a ser hisopado, a menos que nosotros enviemos a un grupo de enfermeros porque consideremos que son contactos estrechos de un caso positivo (…) y cuando digo contacto estrecho significa que ha estado usando mal, o no usando el equipo de protección personal, o no respetando el distanciamiento, cosa que hasta el momento nadie ha dicho que no lo haga. Todo el mundo dice que hace las cosas bien. Entonces sí hicieron las cosas bien, tuvieron bien colocado el equipo de protección personal, estuvieron distanciados, estuvieron siempre con barbijo, se lavaron las manos, y no han estado en contacto directo por más de 15 minutos sin el equipo puesto con alguien positivo, no son contacto estrecho, por lo tanto no son enviados a hisopar”, concluye Sapia.

No hay justificación médica para negar los testeos necesarios, y en ese sentido los trabajadores han realizado pedidos para que se garanticen los mismos. Mientras tanto, el gobierno realiza aprietes y traslados.

El audio es la confesión de una política sanitaria que no está garantizando medidas de bioseguridad para el conjunto de les trabajadores de la salud, en un cuadro de ascenso de la pandemia, en el que ya registraron 14.000 trabajadores de la salud contagiados. Esto expone aún más al sistema de salud, que no cuenta con el personal necesario para enfrentar el virus.

Es necesario garantizar la seguridad laboral de les trabajadores de la salud. El no hacerlo expone al conjunto de la población a un riesgo mayor, más aún cuando el gobierno reconoce que “lo peor está por venir”.

Planteamos que haya un aumento de presupuesto para el sistema de salud, sobre la base de un impuesto extraordinario a las grandes fortunas, para garantizar los insumos de protección y el equipamiento de los hospitales. Es urgente terminar con la restricción a los necesarios testeos para la detección y aislamiento. Además, el aumento salarial para les trabajadores debe ser inmediato. Son medidas elementales que se complementan con la necesaria centralización del sistema de salud, para de ese modo garantizar la protección del personal y la salud de la población en general.