Salud

6/1/2021

Pandemia

Olavarría: se pierden 400 vacunas contra el Covid-19

Las responsabilidades políticas y un nuevo ataque a les trabajadores de la salud y la población

El hecho sucedió el lunes 4 por la madrugada cuando se cortó la cadena de frío del frízer donde se almacenaban las 400 dosis previstas para inocular a les trabajadores de la salud del distrito. El martes 29 habían llegado 450 vacunas a la ciudad, de las cuales 50 pudieron ser aplicadas el miércoles 30. Se esperaba continuar con la vacunación este lunes por la mañana, pero fue suspendida al descubrir lo sucedido.

Desde esa mañana ha habido ataques cruzados entre el Frente de Todos (oficialismo nacional y provincial) y Cambiemos (que gobierna el municipio) sobre a quién le cabe la responsabilidad de lo sucedido. Lo real es que les que vuelven a perder son les trabajadores de la salud quienes vienen luchando en primera línea contra el virus desde que inició la pandemia y esperaban tener algún respaldo con la vacuna.

El manejo de todo el operativo de vacunación se concentra en las autoridades provinciales y quien eligió el lugar para guardar las dosis en Olavarría fue el Director de la Región Sanitaria IX, Ramiro Borzi. El “protocolo” dispuesto por el Ministerio de Salud provincial establece que las vacunas deben ser conservadas en el mismo lugar de vacunación. Fue por eso que se almacenaron en el Hospital de Oncología, dependiente de la Provincia y a cargo de Silvana Resende, en lugar de enviarlas al vacunatorio municipal, con más de 60 años de trayectoria, profesionales capacitades y preparado para almacenar y conservar hasta 70mil dosis de vacunas.

Las controversias sobre el manejo del operativo de inmunización por parte del gobierno de Kicillof no son exclusivas de Olavarría, ya que también Azul y General Alvear (municipios de la misma región sanitaria, igualmente gobernados por Juntos por el Cambio) tuvieron retrasos en la llegada de vacunas y acusaron de discriminación al gobierno y a La Cámpora. Un dato llamativo es que a Olavarría habían llegado la misma cantidad de dosis que se enviaron a Tapalqué, un municipio con diez veces menos población pero gobernado por el peronismo (En Línea Noticias 30/12/20).

Sin embargo, lo dicho no exculpa de responsabilidades a Ezequiel Galli, ya que como intendente debe hacerse responsable de lo que sucede en Olavarría. Sus alertas y lamentaciones sobre la seguridad del Hospital de Oncología se dan una vez perdidas las vacunas. Nada dijo en la previa o en la llegada de las vacunas sobre la falta de condiciones del Hospital de Oncología o la impericia en el manejo de las dosis. El mismo sayo le cabe a José Stuppia, secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales, quien desde la interna del peronismo tildó de “irresponsables” a los funcionarios y calificó de “improvisado” el lugar de almacenamiento.

En la conferencia de prensa realizada en la ciudad, la doctora Resende junto con Borzi y Juan Sebastián Riera, Director Provincial de Hospitales, denunciaron varias irregularidades: la cámara de seguridad que monitoreaba el lugar de almacenamiento estaba apagada y la perilla del frízer donde se encontraban las dosis estaba girada, mientras que los otros frízeres que se encontraban en el mismo lugar estaban en perfecto estado.

Por estas razones, las autoridades provinciales denuncian un supuesto sabotaje y ya hay una investigación judicial en marcha para aclarar lo sucedido. Si existió un sabotaje, este pudo suceder por las precarias condiciones y en las propias narices de quienes no quisieron delegar la vacunación con el argumento de controlar mejor el proceso.

Desde el inicio de la pandemia desde PO propusimos que el control sanitario estuviera a manos de comités electos de trabajadores de la salud que bien podrían haber sido los responsables de llevar adelante esta campaña de vacunación. Entendemos que la existencia de esos comités pondría en primer lugar la emergencia sanitaria y el cuidado de la salud antes que las internas políticas y sus mezquindades. Ahora proponemos que se conforme una comisión independiente que investigue a quienes les cabe la responsabilidad de este ataque a la población para evitar cualquier maniobra o encubrimiento.